One Direction Novelas



Blog dedicado a publicar novelas (fan fictions) de One Direction. Soy @backforbritish y soy la autora y propietaria de todas las novelas que se publican en este blog.

( - TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS - )

SI TENÉIS TWITTER MANDADME UN TWEET DICIÉNDOME QUE OS AVISE CUANDO SUBA UN CAPITULO NUEVO.

Espero que os guste:

viernes, 28 de junio de 2013

Hear Me - Capítulo 24


Sentías como tu corazón latía a un ritmo frenético dentro de ti, tu boca se secaba a medida que tu respiración se hacía más irregular. No podías ni querías enfrentarte a tu padre ahora, no querías darle explicaciones, te traían malos recuerdos.

Ali: ¡___! – Te empujó.
Tu: No... no puedo Ali, no.
Ali: No seas boba, puedes, yo estoy contigo.


El timbre volvió a sonar, tendríais que bajar, no
querías hacer enfadar a tu padre. Bajaste las escaleras y fuiste a abrir la puerta, ese momento se te hizo el más largo de tu vida, notabas como tu pulso aumentaba. Abriste la puerta y lentamente miraste hacia arriba.

Tu: Papá. – Susurraste.

Tu padre se quedó unos segundos sin habla, observaba cada centímetro de tu pálida tez.

Tu Padre: Hola hija. – Sonrió cálidamente.

Le devolviste la sonrisa sin ganas y mirando hacia otro lado, le echabas de menos, le querías mucho, pero eso no quitaba el rencor que sentías hacia él.

TP: ¿Puedo pasar? Asentiste con la cabeza.

Tú padre pasó inspeccionándolo todo, miraba hacia los lados, hacia arriba, hacia trás... «Joder» pensabas. Que tu padre hiciera eso te ponía de los nervios, volvía a aparecer el maniático del control.

TP: ¿Dónde está Alicia?
Tu: Eso me pregunto yo. - Susurraste. - No sé papá.

Le miraste e inconscientemente frunciste el ceño al pensar en su faceta controladora. Él lo notó pero aun así se limitó a entrar al salón sin apenas dirigirte la mirada. Se sentó en el sofá esperando a que te sentaras junto a él. Le mirabas con cierto temor, ¿qué quería? ¿qué estaba haciendo aquí? ¿te llevaría de vuelta a casa?

TP: Siéntate por favor.

Suspiraste a modo de derrota y te sentaste junto a él. Te sentías algo incómoda ya que él no decía nada, tan solo te miraba con una mirada indescifrable. Tu padre levantó su mano hasta tu sien y te apartó los mechones que cubrían tu oreja, la cual llevaba el aparato. Estabas muy nerviosa y con los cinco sentidos activados.

TP: ¿Cómo estas ____ ?
Tu: Supongo que bien.

Él frunció el ceño, parecía que no se creía tus palabras.

TP: ¿Y con respecto a esto? - Dio unos golpecitos a la parte trasera de tu aparato.
Tu: Me va bien. - Inclinaste la cabeza hacia otro lado mientras que con tu mano apartabas la de tu padre que aún tocaba el aparato.
TP: Lo siento, no quería incomodarte.
Tu: Papá ¿qué quieres? ¿Para qué has venido?

Tu padre suspiró mientras que se pasó las manos por la cabeza y se levantaba.

TP: ¿Por qué no has ido a las clases de baile durante todo ese tiempo? ¿Por qué cada vez que te llamaba me colgabas? ¿Por qué me dices que estas bien cuando claramente no lo estás?
Tu: Es que estoy bien.
TP: No me vuelvas a mentir ____.

Tu corazón se disparó el aquel momento.

TP: No sabes la de veces que he querido llevarte de vuelta a casa. - Se acercó a ti muy enfadado.
Tu: No lo hagas. - Le suplicaste.
TP: Dame una sola buena razón por la que no tendría que hacerlo ahora mismo.

Tenías miedo, mucho miedo, sabías que él podría llevarte a casa si quisiera, te podría separar de Niall, de tu sueño y de tu vida en Londres.

TP: En cuanto a tu operación... - Le interrumpiste.
Tu: Cállate papá. - Dijiste sin pensar.
TP: ¿Qué?
Tu: «Mierda, mierda, mierda, mierda» Ah - te quedaste muda. - Lo... lo siento. Me da mucha angustia hablar de esto.
TP: Tarde o temprano tendrás que enfrentarte a esto ____, estas recuperando el poder oír, ahora más que nunca necesitas esa operación.
Tu: ¿Y si pasa algo en la operación y me quedo sorda? Papá, yo no puedo, yo no quiero, yo... - Tus lágrimas brotaron de tus ojos hacia tus mejillas. - Te las secaste con tus nudillos aun que apenas te sirvió. - Papá, no puedes llevarme, no me puedes separar de mi vida en Londres, no quiero. - Tu voz se quebraba.
TP: ¿¡Pero que hay aquí que no haya en casa!?
Tu: ¡ÉL! - Te salió del corazón, ni si quiera pensaste en las consecuencias que llevaría esa respuesta.

Tu padre volvió a suspirar, parecía que estaba exhausto.

Tu: Te lo suplico papá. - Te acercaste a él - Déjame quedarme.
TP: Con una condición.
Tu: La que sea, la que sea, papá. - Te secaste las lágrimas.
TP: Tendrás que operarte.

Una punzada de nervios recorrió todo tu ser, esa operación era lo que más temías. Movías la cabeza, querías contestarle algo, pero estabas completamente muda, tenías pánico ante esa operación y que tu padre te obligara a elegir entre eso y Niall te parecía completamente injusto.

Tu: No... no puedes hacer esto.
TP: Si que puedo.
Tu: Sabes que daría todo por quedarme.
TP: ¿Por quedarte? ¿Con él?

Esta bien, tu padre te tocó uno de tus puntos débiles.

Tu: No sigas por ahí.
TP: Hazlo y jamás te pediré que vuelvas.
Tu: ¿Por qué quieres que lo haga? - pusiste el grito en el cielo - estoy bien así.
TP: Te lo dije una vez, no me hagas volver a repetírtelo.
Tu: Claro. - Suspiraste - Una bailarina no puede ser sorda, es eso. Sabes que diré que no a la operación, es eso, y si digo que no a la operación no seré bailarina. - Procesabas la información muy rápido. - Es eso ¿Verdad? No quieres que sea bailarina, no quieres que cumpla mi sueño ¿Es eso papá?
TP: No ____, lo estas comprendiendo mal.
Tu: No papá, tu no quieres verme feliz. - Estabas totalmente fuera de ti.
TP: ¡Lo que no quiero es que te pase lo mismo que a tu madre!
Tu: ¿¡En serio papá!? Estas enfermo. - Gritabas.
TP: Si tu madre me hubiera echo caso...
Tu: ¿Cómo?

Viste como la cara de tu padre cambiaba de expresión, veías angustia en sus rasgos, sentías que de un momento a otro podría venirse a bajo, jamás habías visto a tu padre de esta forma.

TP: A tu madre le encantaba bailar, como tú. - Suspiró - Bailaba realmente bien.
Tu: ¿Por qué nunca me lo dijo?
TP: Quizás nunca tubo la oportunidad. Déjame terminar y lo comprenderás todo. Un día, cuando tu todavía no habías nacido, tu madre se presentó a un casting para un show, bailo como un ángel, lo puedo asegurar. Lo mejor de todo fue que la cogieron para ser la protagonista. - Vislumbraste una pequeña sonrisa en su cara. - Cuando era el día del show la llevé como unas tres horas antes de que empezara para que pudiera ensayar, fuimos al escenario, tan solo estábamos ella y yo. Me senté en un rincón del escenario viendo como se movía, me parecía hermosa, como se movía, como hacía que cada paso fuera mil veces mejor que el anterior. Ella se acercó a mi, me cogió de la mano y me llevó hacia el centro del escenario, me tendrías que haber visto, bailando a su lado parecía el hombre más patoso del mundo. - Se rió. - Nos lo estábamos pasando muy bien, aún pudo ver su felicidad en sus ojos, son esas cosas que se te quedan grabadas, como una foto. De repente oímos unos ruidos y corriendo nos marchamos del escenario, ya que no podíamos estar ahí. Dejé a tu madre en los ensayos y me fui para coger sitio entre las primeras butacas. Pasaron los minutos, nadie aparecía, supuestamente el show debió haber empezado, pero nada, una hora después me enteré de que tu madre se había roto una pierna ensayando, corriendo salí de las butacas y me dirigí a los camerinos, pero tu madre no estaba, la ambulancia se la había llevado. Fui al hospital y me la encontré en una cama, llena de magulladuras.
Tu: ¿Que le pasó? - Preguntaste con angustia.
TP: Bajando las escaleras para salir a escena, no se sabe si se cayó o si la empujaron.
Tu: No... - Te tapaste la boca con tu mano temblorosa.
TP: Después de aquello jamás pudo bailar como antes, después de aquello jamás fue la misma. Hasta que llegaste tú. - Te miró con lágrimas en los ojos. - Tú le llenaste el vacío que yo jamás le pude llenar, por eso tu madre se volcó tanto contigo a la hora de bailar, quería que tu consiguieras lo que ella no pudo. ____ yo quiero que cumplas tu sueño, por ti y por ella. Quiero que seas la mejor en esto.
Tu: Papá... yo, lo siento. - Volviste a llorar.
TP: No mi vida, no tienes que pedir perdón, lo tengo que hacer yo. - Te abrazó con fuerza.

Escuchar esto y de la voz de tu padre fue una de las experiencias más importantes de tu vida, te había resuelto muchas dudas y te había quitado un peso de encima.

Tu: Papá, lo haré, me operaré, lo haré por ella. - Hundiste tu cabeza en su pecho mientras que aguantabas las ganas de llorar.



[COMENTAD QUE OS HA PARECIDO EL CAPÍTULO EN @BACKFORBRITISH, GRACIAS POR LEERLO]
[NO OS OLVIDÉIS DE VOTAR EN LA ENCUESTA SOBRE LA NOVELA FINAL]


2 comentarios:

  1. WOW precioso!!! Me encantaa . Espero que la sigas.
    Besos
    Julia xx

    ResponderEliminar
  2. no se como lo aces pero lloro con esta novela jajaja
    dos palabras : ME ENCANTA!!!! siguela

    ResponderEliminar