One Direction Novelas



Blog dedicado a publicar novelas (fan fictions) de One Direction. Soy @backforbritish y soy la autora y propietaria de todas las novelas que se publican en este blog.

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Espero que os guste:

domingo, 28 de julio de 2013

Hear Me - Capitulo 31

Niall te acompañó hasta la puerta de tu casa, aún seguíais agarrados de las manos, estabas tan agusto así, sintiendo su roce entre tus dedos. Estabas más tranquila ya que las luces de tu casa estaban apagadas, eso quería decir que tu padre aún no había vuelto del trabajo, te tranquilizó un poco ya que no tendría que encontrase con Niall, sabías que le acosaría a preguntas y a miradas desafiantes, no querías hacer pasar ese mal trago a Niall, o por ahora no. Soltaste su agarre para rebuscar en tu bolso las llaves de la casa, Niall, mientras tanto, te abrazaba por detrás dando pequeños besos en tu hombro, el pulso te temblaba cuando hacía eso. Le apartaste de ti para poder continuar buscando tus llaves y al final las encontraste, las metiste en la cerradura y la abriste lentamente. Suspiraste al ver la casa bacía.

Niall: ¿Estás bien?
Tu: ¿E-eh? ¿Qué? - Te diste la vuelta alzando tu vista a sus ojos.

El te había notado más apagada de lo normal, le angustiaba tanto verte así.

Tu: Si, tan solo... bueno, cuando entraba a mi casa por estas horas... m-mi madre siempre estaba esperándome en la cocina... y - Respirabas agitada por los recuerdos.

Niall te empujó delicadamente hacia la casa, cerró la puerta y se apoyó en ella tendiéndote una mano, le miraste algo insegura, pero decidiste cogerla. Te atrajo hacia él en un cálido abrazo, hundiste tu cabeza en su pecho, dios, su olor era tan reconfortador para ti.

Niall: Vas a estar bien pequeña - Te besó en la frente.
Tu: Contigo me siento bien, se me olvida todo lo malo.

Los abrazos de Niall eran como un tranquilizante para ti, te sentías tan bien agarrada a su torso, sintiendo su corazón nervioso por tenerte cerca bombardeando cerca de tu oreja, su perfume invadiendo tus sentidos, todo él era un ser de placer del cual necesitabas para vivir. Inclinaste tu barbilla posando tus ojos en sus labios arqueados hacia arriba, admirabas cada centímetro de su sonrisa, era perfecta, te inundaba de tranquilidad, felicidad y de sentimiento, era irresistiblemente hermoso cuando lo hacía. Subiste tu mano derecha hacia su cuello y lo acariciaste lentamente, su cuello vibraba en gemidos de placer que hacían cosquillas en las yemas de tus dedos, seguiste con su camino de caricias hasta su mandíbula definida, apenas te detuviste en ella, los labios de Niall acaparaban toda tu atención. El no bajaba la guardia, miraba cada movimiento que hacías. Rozaste sus labios con tu dedo pulgar siguiendo la línea de su irresistible sonrisa, sin apenas darte cuenta le estabas dando un beso en ellos, no lo pudiste evitar, eran tu debilidad, sabían tan bien y sabía como hacerte sentir tan bien con sus deseables besos. Lentamente separó sus labios de los tuyos haciendo un sonido seco.

Niall: Tengo que irme - Apoyó su frente en la tuya mientras que miraba a tus labios.

Su aliento aún seguía oliendo dulce por el efecto del alcohol, eso te encantaba. Apretaste tus labios queriendo retener sus besos. Un nudo inundó tu estomago, te daba mucha angustia verlo marchar, lo odiabas, no querías que se fuera.

Tu: ¿Me vas a llamar mañana? - Seguíais en ese abrazo tan acogedor.

El asintió con la cabeza moviendo la tuya, el gesto te hizo reír y al hacerlo inclinaste tu cabeza, movimiento que Niall aprovecho para besarte el cuello. Mordía tu cuello con cuidado pero con un punto de dolor que hacía que te excitases de manera incontrolable. Dejó caer sus manos, creías que iban hacia tu trasero, pero no, el se deshizo de vuestro abrazo.

Niall: Sé que me tengo que controlar, por eso paro - No te quitaba la vista de encima.
Tu: Niall... y-yo - Realmente algo fuerte dentro de ti quería haber seguido.

El te sonrió haciendo que te derritieses por dentro.

Niall: Mañana te llamo, pequeña - Te dio un beso en la frente de despedida.

Viste como atravesaba la calle hacia su coche, te morías de ganas de ir y abrazarle, de retenerlo entre tus brazos, e incluso sentías ganas de hacerle tuyo en ese mismo momento. Tu corazón se aceleraba mientras aumentaba la distancia entre vosotros dos, de repente algo se activó en ti.

Tu: ¡Niall! - Gritaste.

El giró sobre sus pies andando lentamente hacia atrás mientras te observaba. Valientemente corriste hacia sus brazos y te subiste encima del dándole un beso desesperado.

Tu: Mañana mi padre no está en casa por la noche... q-quiero estar contigo - Te aferrabas a su cuello para no caerte mientras el te sujetaba por los muslos.

Sentiste su aliento agitado por su risa nerviosa contra tus labios.

Niall: Mañana por la noche seré todo tuyo entonces - Te besó.

Veías de nuevo el coche de Niall desvanecerse entre la oscura neblina londinense.
Tu casa estaba bacía, sumida en una oscuridad que daba miedo, corriste hacia tu habitación y encendiste la luz de tu mesita de noche. Cerraste la puerta y fuiste el cuarto de baño para asearte. Al salir con el pijama puesto te tiraste encima de la cama y te acurrucaste a la almohada que le habías tirado a Niall horas antes. Suspiraste al pensar en él, al pensar en cuanto te frustraba no poder corresponderle de esa manera aun queriendo ¿por qué no podías habiéndolo hecho ya? Recordaste cuando Niall y tú estabais en tu cama, el placer de recordar aquellos roces te hizo estremecer y cambiar de postura enredado tus piernas. Pensaste en todo el placer que te dio verle casi desmoronándose debajo de ti cuando le provocaste ese orgasmo con unos simples roces, sin tener penetración, tan solo así. Frunciste el ceño cuando una idea pasó por tu mente, te pareció algo absurdo, pensabas que jamás lo harías bien, pero después de darle vueltas y vueltas a la idea pensaste en que era lo mejor que podías hacer, incluso algo dentro de ti se encendió al pensar en que te podría gustar, algo raro en ti.
Cogiste el móvil para ver la hora, eran las dos y media pasadas, tu padre aun no aparecía por la puerta, sabías que iba a tardar, como siempre lo hacía. Tamborileaste los dedos en la parte trasera del móvil al pensar en Niall y si estaría en linea, entraste en su conversación comida por la intriga, pero no estaba, querías hablar con él, pero decidiste no hacerlo ya que podría estar dormido y no querías despertarlo. Bloqueaste el móvil y lo guardaste a tu lado en la cama, alargaste la mano para apagar la tenue luz y te aferraste al cojín por debajo de tus sabanas. Entraste en un profundo sueño.

Tu: ¿¡Ah!? - Algo vibrando a tu alrededor te despertó.

Palpaste con tus manos los bultos de tu cama desesperada por encontrar el maldito móvil para que dejase de vibrar. Al fin lo encontraste y lo desbloqueaste para el ver mensaje.

| Niall |
- ¿Estas despierta? 4:27

«Cabrón» se te escapó de tus labios entre risas. Te incorporaste aun riéndote por la situación.

| Tu |
- Ahora si, feo 4:29
| Niall |
- Lo siento hermosa 4:30
| Tu |
- No pasa nada 4:30
- ¿Y tú? ¿Que haces que no estás dormido? 4:30
| Niall |
- Pensaba en ti 4:32

Gritaste hacia tus adentros por la emoción, te entraron unas ganas locas de abrazarle y de comértelo a besos.

| Tu |
- Yo soñaba contigo 4:33
| Niall |
- Me gusta que sueñes conmigo 4:33
- ¿Que soñabas?
| Tu |
- Eso te lo contaré mañana cuando te vea 4:33
| Niall |
- Lo has conseguido, esta noche no duermo 4:35
| Tu |
- Descansa Niall o mañana te quedarás dormido cuando estés conmigo y yo te quiero perceptible 4:36
| Niall |
- ¿Me quieres perceptible? ¿Para qué? 4:37
| Tu |
- Aaaah, jajaja, no sé, no sé 4:38
- Buenas noches Horan 4:38
| Niall |
- Buenas noches pequeña, descansa, con lo que tengo planeado para mañana tu tampoco dormirás 4:40

Tus ojos se abrieron como platos, te quedaste perpleja al leer la última frase de Niall, volviste a repasar cinco mil veces la frase ¿A que se refiere con eso? El ha dicho que no te va obligar a hacer algo que tu no quieras... pero ¿Y si de verdad querías? Ahora él había conseguido que la que no durmiera en toda la noche fueras tú.
Tus ojos se abrieron pesadamente por la luminosa claridad que entraba por la gran ventana de tu habitación, te quejaste mientras te dabas la vuelta y te tapabas la cabeza con la almohada, querías seguir durmiendo, esta noche no habías podido conciliar bien el sueño. A los pocos minutos notaste como algo te rozaba la espalda, corriendo te gritaste mientras te incorporabas de un salto.

Tu: ¡Papá, que susto! - Gritabas.
Tp: Lo siento hija, pero son más de las doce, ya es hora de que te levantes.

Asentiste con la cabeza intentado tranquilizar tus nervios. Fuiste a asearte al cuarto de baño, cuando terminaste cogiste el móvil y lo desbloqueaste, Niall se había desconectado ayer a las cuatro y media de la noche y ya no se había vuelto a conectar, pensaste que quizás te quiso dejar con la intriga. Sentiste como el nudo de tu estómago se hacía más grande al pensar en lo que Niall tenía planeado para vosotros esta noche y si tú ibas a ser capaz de hacer lo que tenías planeado. Agitaste la cabeza para quitarte esos pensamientos de encima. Decidiste ir a la cocina a prepararte algo de comer. Bajaste las escaleras y de camino a la cocina te encontraste la puerta del despacho de tu padre encajada, la intriga pudo contigo y la abriste un poco para ver que es lo que andaba haciendo. Viste por una fina línea que estaba con traje de nuevo, aunque todavía no se había puesto la corbata, estaba escribiendo algo en su ordenador, parecía algo disgustado por la expresión de su cara. Abriste un poco más la puerta haciéndola chirriar, en ese momento tu padre alzó su vista hacia ti.

Tp: ¿Qué haces detrás de la puerta? - Arqueó sus cejas.
Tu: N-nada, tan solo ver que es lo que hacías.
Tp: Ah, ven, entra ___.

Abriste la puerta del todo y entraste al despacho, era muy luminoso y grande, tenía unas estanterías llenas de libros de lectura, de informática, enciclopédicas.., y unos sofás al lado de la ventana que daba a un jardín trasero, sabías que después del fallecimiento de tu madre tu padre hizo algunos cambios en la casa, quizás para no tener tantos recuerdos de ella. Recordabas que de pequeña te encantaba jugar al escondite por tu casa y siempre elegías este lugar para hacerlo. Después de unos segundos sin hablar clavaste la vista en tu padre.

Tu: ¿A que hora viniste ayer?

Tu padre se levantó de la silla, rodeó su mesa y se sentó en el pico.

Tp: Eso te lo tendría que preguntar yo a ti - te acusó.
Tu: ¿Qué?
Tp: Ayer llamé a las doce, para saber como estabas y fíjate por donde no me lo cogió nadie.

Pensaste rápidamente en una buena escusa.

Tu: T-tenia el audífono quitado.

Él te miró extrañado, sabía que no te lo quitabas casi nunca y que aun así algo, aun que fuese algo muy leve lo podías oír.

Tp: Ayer... bueno, hoy, vine a las cinco.
Tu: ¿Y hoy, bueno... mañana a la madrugada?
Tp: No sé, supongo que a esa hora también, ya te dije que hasta el domingo no podré parar.
Tu: Vale - Suspiraste.

En cierta manera te alegrabas ya que querías pasar esta noche con Niall. Dejaste a tu padre seguir con su trabajo mientras te ibas a por tu taza de chocolate. Veías por el cristal del microondas como la taza daba vueltas, te embobaste una vez más mientras lo mirabas, pensabas en Niall. «Relájate» Pensabas.
Pasaste todo el día encerrada en tu habitación, tu padre hacía horas que se había ido al trabajo, por lo cual no tenías nadie con quien hablar para que te despejara de tus insoportables nervios. Te habías probado todo tu armario entero pensando en qué es lo que más le gustaría a Niall y la verdad es que no lo sabías, sus palabras de ''te ves hermosa con todo'' no eran de gran ayuda, sobre todo si no te veías guapa con ninguna cosa que te probaras. Al final cogiste una blusa con botones sin mangas y unos jeans rasgados con tus vans. Era algo básico, pero te sentías cómoda con ello.
No dejabas de mirar el reloj, cuando viste las siete y media el corazón te dio un vuelco. No habías hablado en todo el día con Niall, no te atreviste a llamarle y él no se había conectado desde ayer. Miraste de reojo el móvil en tu mesita de noche, te acercaste y lo cogiste para desbloquearlo, pasaste tus dedos por unos cuantos contactos antes de encontrarte con el de Niall, dudosamente tu dedo se acercaba y se alejaba de la tecla de llamar. Al final le diste sin pensar. Te acercaste el móvil a la oreja, cada sonido que hacía dando a entender que había línea te ponía más nerviosa, por un lado no querías que Niall contestara.

- Hola pequeña.

Suspiraste mientras apretabas los ojos, « Relájate » te repetías hacia tus adentros.

- H-hola.
- He estado liado preparando cosas, por eso no te he podido llamar.
- ¿Liado? ¿Con qué?

Maldeciste en silencio mientras apretabas más los ojos, caíste en conclusión que era algo de esta noche. Oíste su risa por la otra línea.

- ¿A que hora te paso a buscar? - El continuó.
- No hace falta, iré yo.
- No, ya es casi de noche.
- Niall, no soy una niña de seis años.

Él dudó unos momentos.

- Está bien, no tardes.
- N-no.
- Adiós pequeña.
- Adiós Horan.

Colgaste y agarraste el teléfono fuerte entre tus manos. Estabas nerviosa, mucho.
Cuando saliste de tu casa ya había anochecido. Andaste a paso ligero hacia la casa de Niall, en un cuarto de hora llegaste al gran edificio. El mismo guardaespaldas que estaba la última vez te abrió la puerta, quizás Niall le había dicho que esperaba visita, le sonreíste tímidamente, ahora no estabas como para hablar, el nudo en tu garganta era demoledor. Andaste por el vestíbulo hacia el ascensor, entraste y le diste a la planta catorce, tu pulso iba demasiado rápido en aquellos momentos. Las puertas se cerraron lentamente, tu pecho subía y bajaba deprisa, el momento se acercaba. Miraste hacia la pequeña pantalla que había en el ascensor indicando en que planta estaba, parecía que pasaba una eternidad mientras que subía de planta en planta. Al final el ascensor se paró y se abrieron las puertas de la misma manera que anteriormente se habían cerrado, suspiraste con fuerza y saliste del. En un abrir y cerrar de ojos estabas frente a su puerta ''213''. Te acomodaste el pelo sobre un hombro y le diste al timbre. Segundos después Niall te abrió la puerta. Se quedó un par de segundos admirándote como si fueras una diosa, un trofeo hermoso que no dejaba de relucir.

Niall: Pasa - Te sonrió.

Pasaste lentamente por su pasillo hasta llegar al gran espacio abierto que era el salón, Niall te seguía por detrás sin despegar sus increíbles ojos celestes de ti. Sentías su presencia acechadora detrás de ti, su aliento rozándote el cuello descubierto, sin poner ningún tacto en tu piel.

Niall: ¿No me vas a dar un beso?

Tragaste saliva involuntariamente, tu respiración aun era irregular. Te diste la vuelta lentamente dejando tu bolso en una silla cercana a vosotros. Lentamente alzaste la vista buscando sus deseables ojos celestes, al fin los encontraste posados en ti. Se acercó levantando una mano hasta tu cuello y acariciándolo por detrás subiendo sus dedos por tu cuero cabelludo. Tu piel se puso de punta ante ese gesto, controlaste un gemido que intentaba salir de tus labios.

Niall: ¿Qué te pasa pequeña? Relájate.

Asentiste mirándole a los ojos, subiste tus manos por su pecho y las cerraste en puño agarrándote de su camisa.

Tu: Niall... yo... - tu boca se secaba por tus incontrolables nervios.

Cerraste los ojos, inspiraste profundamente y le miraste.

Tu: Enséñame tu habitación - Le susurraste.

Él te miró con una sonrisa en su cara.

Niall: No.

Te dejó muy confusa aquella frase, frunciste el ceño mientras soltabas su camisa dejando unas arrugas en su camisa blanca, rápidamente el cogió tus muñecas y las pasó por detrás de su cuello incitándote a presionar en el.

Niall: No lo haré sin besarte antes.

Inclinaste tu cabeza buscando los labios de Niall, él los bajó y los juntó con los tuyos en un beso apasionado, bajó sus manos descaradamente hacia tu trasero y lo apretó juntandote a el, una risa se escapó de tus labios mientras le besabas, te separaste del y corriste hacia las escaleras pero antes de subir el te atrapó.

Niall: ¿Dónde vas? - Te volvió a besar.
Tu: Sube conmigo, tengo que... decirte... tengo que... - Tus palabras se amontonaban en tu boca pero no sabías como ordenarlas.

El te cogió de la mano y te guió hacia su habitación en la segunda planta. Era enorme, estaba decorada con las paredes negras, armarios y mesas que contrastaban en un blanco, una gran cama central con sabanas oscuras y dos guitarras a un lado de la cama, aun por todas las cosas negras de su habitación parecía muy confortable, te pareció muy estilo Horan, aunque te sorprendió ver lo recogido y ordenado que estaba todo.

Niall: ¿Te gusta?

Besó tu cuello mientras te abrazaba por detrás dándote pequeños masajes en el vientre.

Tu: Si, pero Niall... - Le separaste de ti.

Querías hacerle sentir como él te hacía a ti con sus besos y sus caricias, querías darle placer de una manera distinta, algo nuevo para ti. Te armaste de valor y le miraste a los ojos tan cerca del que casi podías sentir su aliento.

Tu: Quiero... probar algo nuevo... para mi - Sentiste el nudo de tu barriga tirar dando un inmenso calambre de nervios al rededor de tu vientre.

Él te miraba con el ceño fruncido. Miraste hacia abajo, tu mano temblorosa se ceñía a la cintura de su pantalón metiendo un dedo por el, Niall no apartaba la vista de tus actos, notabas como su respiración se hacía más pesada contra tu cara. Con tu mano libre desabrochaste el botón del pantalón de Niall, tu pulso y tu respiración estaban a mil, no sabías como hacerlo. Bajaste su cremallera y al intentar bajarle los pantalones él te paró.

Niall: No.
Tu: ¿Qué?
Niall: No quiero que te sientas obligada.

Un rubor se apoderó de tus mejillas.

Tu: No me siento obligada - No podías mirarle -.Y-yo quiero.

El te soltó las manos y lentamente sus pantalones cayeron al suelo dejando ver sus boxers negros, te cogió en brazos y te llevó a la cama, tumbandote en el centro de ella. Niall se subió encima de ti y empezó a besarte y acariciarte el cuello bajando lentamente por tu escote, te estremecías debajo del, cada una de sus caricias te excitaba más que la otra, su tacto se posó en tu pecho, lo apretaba y lo acariciaba cuidadosamente haciendo que gimieras de placer.

Niall: ¿Puedo quitártela? - Preguntó sin aliento agarrando tu blusa.

Asentiste sin poder hablar, él se incorporó en tus caderas y de un tirón te desabrochó todos los botones dejando ver tu pecho y tu vientre subiendo y bajando continuamente por la excitación. Bajó su cabeza hacia el valle de tus pechos y lamió en zig zag hasta tu cuello dejando un rastro de besos húmedos por tu mandíbula. No podías dejar de gemir, era demasiado placer. Bajó hacia tu vientre besándolo, lamiéndolo y dándote pequeños mordiscos que te hacían estremecer.

Tu: Ni-all - Te quejabas.

El paró de besarte, puso cada mano al lado de tu cabeza y se inclinó para tenerte justo debajo, alzaste tus manos hasta tocar su vientre por la tela.

Niall: Déjame darte placer antes de que tu me lo des a mi, por favor - Casi suplicó.
Tu: Quiero quitártela - Agarraste su camisa con fuerza.

Niall rodó a tu derecha y se sentó apoyando la espalda en el cabecero de la cama tirando todos los cojines contra el suelo. Pusiste cada rodilla a cada lado de sus muslos pero no te sentaste encima del, aún no querías tocar aquella zona que empezaba a hacerse notar. Agarraste la tela blanca y se la sacaste, admiraste su desnudo torso, notabas que no se había puesto ante la exposición del sol por su blanca piel, pero aún así te parecía irresistible y estaba más fuerte de lo que recordabas. Pasaste tus manos por su pecho, en una caricia haciendo que se le pusiera la piel de punta, y bajaste hasta los abdominales, sin querer te sentaste encima rozando el bulto de los boxers de Niall, estaba tan duro. Él inclinó la cabeza hacia tras cerrando los ojos y mordiéndose el labio para no gemir mientras tu te levantabas de tu posición. Tus pechos quedaron a la altura de su cara lo que el aprovechó para besar la parte que no estaba cubierta por tu sujetador, pasaste tus manos por detrás de su cuello hasta tu nuca y redaste tus dedos en su pelo, echaste las cabeza hacia tras con la boca abierta disfrutando de cada una de las caricias que te daba. Le separaste y bajaste la cara para besarle desesperadamente. Obligaste a que Niall se tumbara en la cama. Besándole encima del mientras te acariciaba el trasero, quisiste quitarle las manos de ahí ya que te impedían seguir hacia abajo.

Tu: Por favor Niall, déjame - Sentías un nudo en la garganta por la excitación.
Niall: No hace falta que hagas esto.
Tu: Los... dos queremos.

Niall subió las manos hacia tus caderas dudosamente abriéndote paso, bajaste lentamente por su pecho dándole infinidad de besos, Dios, como amabas su torso, ibas cada vez más abajo dando pequeños besos entre el bello de debajo de su ombligo que seguía hacia debajo de sus boxers. Agarraste la cinta y lentamente la bajaste con dificultad, Niall subió un poco las caderas, al fin le pudiste liberar de ellos tirándolos hacia abajo y el se los quitó con habilidad entre sus pies. Miraste el miembro prominente de Niall, cada vez te estabas poniendo más nerviosa, sentías como el nudo de tu garganta se hacía más intenso, viste como el te miraba con cautela. Lentamente alzaste una mano hacia su miembro, tragando saliva involuntariamente, empezaste a subir y a bajar tu mano reliada a él. Niall volvió a inclinar la cabeza hacia atrás y soltó un gemido grave, te encantó verle así. El puso una mano sobre la tuya incitándote a que lo apretaras más y a que fueras más deprisa, sus dedos se enredaron con los tuyos dándote esa valentía que tanto necesitabas, después de unos segundos le quitaste la mano y lo hiciste tu sola, Niall levantaba sus caderas a la misma vez que gemía, era impresionante verle. Tu corazón bombeaba con fuerza sobre tu pecho cuando acercaste su punta a tus labios, él no se esperaba que fueras a hacer eso, corriendo posó una mano en tu hombro para que parases.

Tu: Quiero hacerlo Niall - le suplicaste.

Niall tenía la respiración muy agitada, apenas podía hablar, se limitó a asentir con la cabeza mientras cogía grande bocanadas de aire. Lamiste con tu lengua la punta, sabía salada y estaba demasiado dura, sentías los ojos de Niall clavados en ti, admiraba tu valentía. Seguiste lamiendo hasta que cuidadosamente la introdujiste en tu boca.

Niall: Oh, Dios - Gimió inclinando la cabeza.

La volviste a sacar y a meter un numero repetido de veces mientras bombeabas el resto con tu mano, sentías como Niall intentaba quedarse quieto aunque apenas lo conseguía con tus masturbaciones. Apretaste como él te insinuó antes mientras que con la lengua lamías la parte posterior del miembro.  Niall levantó una mano hacia tu cabeza para pasarte el pelo que cubría tu cara a un hombro, estaba realmente excitado, los dos lo estabais. Él se incorporó poniendo su peso en sus codos mientras tu seguías bombeando con fuerza su miembro, no podía dejar de gemir, estabas consiguiendo tu objetivo, estas haciendo que Niall disfrutase con el placer que le otorgabas. Sus gemidos se hicieron más continuos, su miembro palpitando en tu mano cada vez más duro.

Niall: P-para, ____ pa...ra - Suplicaba entre jadeos.

Paraste y en un segundo se puso encima de ti como antes, bajó su cabeza para besarte mientras que con la otra se tocaba, estaba llegando al climax, ahogaste sus gemidos graves entre sus besos mientras notabas un liquido caliente chocar contra tu estómago. Te dejó de besar para respirar mientras te sonreía posando su frente en ti, lo que hizo que sintieras en tu pecho un calambre tan especial, volvió a posar sus labios en ti, perdisteis la noción del tiempo entre besos y caricias, te sentías realmente bien. El descansó su cuerpo de lado en el colchón mientras que te pasaba una mano por debajo de tu pecho.

Niall: ¿Estas bien? - Te besó en el hombro.
Tu: Aja - Estabas exhausta - ¿Y... tú?
Niall: Si - Se rió, estoy muy, muy bien. Con esto me refiero a que eres sorprendente.

Te giraste hacia el, veías las gotas de sudor por su frente, sus ojos celestes te miraban con deseo, tu corazón se aceleraba cada vez que Niall te miraba de esa manera, veías que era el hombre más hermoso y sexy del mundo. Te acurrucaste junto a el a pesar de la calor que emitían vuestros cuerpos aun calientes, entrelazasteis las piernas como queriendo enredaros en la piel del otro, Niall te rodeo con su brazo para mantenerte cerca, sentíais vuestro sudor en el cuerpo del otro, pero aun así te sentías en el paraíso cada vez que Niall te abrazaba tan fuerte como lo estaba haciendo ahora. Besaste su pecho y en sus suspiro dijiste ''Te amo''.




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viernes, 26 de julio de 2013

Hear Me - Capítulo 30

Miraste el reloj de reojo y suspiraste cuando viste que habían pasado casi dos horas después de que Niall se hubiese ido. Saliste de tu cuarto dirigiendo tu cansado paso hacia la cocina, entraste y te preparaste un chocolate caliente, ahora mismo eso era lo único que te podría tranquilizar. Volviste tus ojos hacia la isla central de la cocina, recordabas a tu madre y a ti preparando pasteles, cocinando, teniendo charlas sobre todo o simplemente disfrutando del silencio que puedes tener al lado de una persona importante. Un suspiro cayó de tus labios al inundar tu ser de tantos recuerdos. Agarraste con fuerza el baso retenido entre tus manos, estaba caliente, pero ese calor que te abrasaba las manos te reconfortaba.

Encendiste el ordenador y entraste a Tumblr para evadirte de todos los pensamientos que te daban vueltas a la cabeza. Admirabas cada una de esas fotos, paisajes, tatuajes, abrazos... hasta que Niall apareció en una de esas fotos al azar. Se veía tan lindo en aquella foto sacada hace unos años, te fijabas en su sonrisa, era perfecta, aunque la gente dijera que no, a ti te parecía adorable, fijaste tu vista en sus rasgos, eran menos definidos de lo que son ahora, ahora tenía cara de hombre aunque por dentro seguía siendo el mismo niño del cual te enamoraste sin apenas haberle visto una sola vez, te reíste al pensar en eso, ahora estás con él, lo cual te seguía pareciendo casi imposible, como un sueño y si era un sueño no querrías despertar.
Sentiste tu móvil vibrando e iluminándose al lado del ordenador, corriendo cogiste el audífono y te lo colocaste para atender la llamada.

- ¿Diga? 
- Hola pequeña.

Una punzada de nervios te recorrió todo el pecho.

- Hola Niall - Sonreíste discretamente. 
- Perdón por no llamarte antes.
- N-no pasa nada.

Miraste sin querer la pantalla de tu ordenador, aún seguía la foto del, sonreíste como una estúpida mientras la quitabas y bajabas la pantalla.

- ¿Esta noche tienes algo que hacer? - Él preguntó.
- ¿Esta noche? No sé, creo que no - Respondiste confusa.
- Bien - Oíste su ronca risa - Estaré ahí sobre las nueve.
- ¿Sobre las nueve? - Dijiste desanimada -. Ven ya, por favor, quiero verte.

El suspiro de Niall se oyó por un ilito en la otra línea.

- Ni te imaginas las ganas que tengo yo.
- Pues ven y quédate conmigo esta noche.
- ¿Eso es una indirecta? - Pudiste imaginarte su sonrisa pícara en su boca. 
- No lo sé - Le dejaste en tensión.
- ¿Con tu padre en casa? 

«Mierda» pensaste, no te habías acordado de que tu padre estaría en casa hoy por la noche.

- Eso lo hará aun más excitante - El prosiguió descaradamente.
- Cállate Horan - Te reíste mientras un rubor se apoderaba de ti.

Pasaron unos segundos hasta que por fin él habló.

- Adoro tu risa.
- Ven ya, por favor - Suplicaste.
- Salgo ahora mismo, pequeña, adiós.
- Adiós Niall.

Bloqueaste el móvil, lo dejaste encima del ordenador y fuiste al armario para ponerte una camiseta y unos pantalones cortos. Cuando terminaste bajaste a la puerta, la abriste y te sentaste en el primer escalón esperando a Niall, unos minutos después él apreció en su maravilloso coche negro. Le viste bajarse del coche y darle a las llaves para cerrarlo mientras que se oía un pitido sordo a tus oidos a modo de seguro. Entraste en la casa esperándole.

Niall: Hola pequeña - Cerró la puerta detrás del.
Tu: Hola - Caminabas hacia atrás esperando que él se aproximara a ti.

Él te miraba mientras lentamente se acercaba, cuando tu cuerpo dio con la fría pared te estremeciste un poco llenando a Niall de ansias por tenerte como antes. Él puso sus manos a los dos lados de tu cabeza apoyándose con las palmas en la pared.

Niall: ¿Fría? - Refiriéndose con una sonrisa a la pared de detrás de ti.

Negaste con la cabeza.

Tu: Muy caliente - Te escabulliste de sus brazos y corriste hacia tu cuarto mientras Niall te pisaba los talones.

Entraste en tu cuarto y te escondiste en el baño. Agarraste el pomo por dentro con fuerza cuando Niall empezó a girarlo, te reías cuando intentabas cerrar la puerta pero no podías, otra vez Niall dejaba claro que tenía más fuerza que tú abriendo la puerta.

Niall: ¿Escondiéndote de mi?

Le mirabas deseando besar aquellos labios. Niall se acercaba lentamente mientras tú te quedabas en el sitio hipnotizada por sus increíbles ojos. Te cogió de la cintura y te presionó junto a él. Lentamente subiste tus manos hasta su cuello para bajarle y besarle como si no hubiese un mañana, enredando vuestras lenguas. Él dejaba besos en tu cuello, en tu pecho, en tu mandíbula mientras que tu piel se ponía de punta por el efecto de sus caricias. Te agarró de los muslos y te subió a el mientras tu entrelazabas tus piernas por detrás de la cintura sin dejar de besarle, ahogaste unos gemidos cuando Niall te besaba desesperadamente.

Tu: Niall, Niall - Le empujabas hacia atrás.

El dejó de besarte mientras recuperaba el aliento.

Niall: Lo sé, lo siento - Te bajó de su cintura.

Apoyó su frente en la tuya, aún estabais con la respiración agitada. Sentías un nudo en la garganta, no querías ver a Niall tan frustrado, pero no era tu intención.

Tu: ¿Por qué me costará tanto? - Te aferrabas a él.
Niall: No te voy a presionar, ya sabes lo que es... lo que se siente, si no te gustó yo...

Miraste a Niall como si estuviera diciendo la mayor estupidez de su vida.

Tu: Me hiciste sentir como nadie antes lo había hecho - Le susurraste en su oído.
Niall: Puedo decir lo mismo - Te besó.

Le devolviste el beso apasionadamente mientras enredabas tus dedos en su pelo y tirabas del con suavidad. Salisteis del baño, Niall se sentó en tu cama mientras te veía coger la ropa que usarías hoy por la noche.

Tu: ¿Y que me pongo?
Niall: Estas hermosa con todo.

Suspiraste mientras te reías.

Tu: Lo digo enserio tonto.
Niall: Y yo.
Tu: ¡Niall! - Le sonreíste mientras le tirabas un cojín.
Niall: Ponte algo cómodo, no sé.

Te reías de espaldas a él, sabía que no estaba cómodo hablando de este tema. Cogiste una blusa blanca con tachuelas, unos jeans y tus vans. Volviste al cuarto de baño para darte una ducha rápida. Cuando saliste maldeciste a todo ya que se te había olvidado la ropa interior. Respiraste hondo y te calmaste. Te reliaste la toalla al rededor del cuerpo y saliste del cuarto de baño encontrándote a Niall tumbado en la cama hablando por el móvil.

Niall: Si... Por la noche, pero asegúrate d.... - Se quedó mudo al verte.

El momento era muy bochornoso, no querías que Niall te viera con esa toalla tan corta, aunque sabías que él estaba encantado por como te miraba con esos ojos abiertos como platos y la sonrisa que inundaba su boca. Corriste hacia el cajón de la ropa interior que estaba al lado del. Volviste a maldecir para tus adentros cuando Niall colgó el teléfono de repente.

Niall: Puedes llevar eso, a mi me gusta más - Sonrió.
Tu: Mira para otro lado cachondo - Te reías.

Cogiste tu ropa interior con rapidez y cerraste el cajón, te decidías a ir corriendo hacia el cuarto de baño pero Niall te agarró por detrás. En una caricia llevó sus manos por tus caderas hasta tu vientre palpando la tela blanca que te cubría. Posó su cabeza en tu hombro y la subió hacia tu cuello oliendo tu champú de cuerpo.

Niall: Mmm, hueles muy bien - Masajeaba tu vientre mientras que con las puntas de los dedos llegaba más abajo.

Un leve gemido salió de tu garganta mientras el te acariciaba y dejaba besos al rededor de tu cuello. Sentiste el aliento de su risa en tu cuello lo que te hizo sonreír y estremecer al mismo tiempo.

Niall: Ve a ponerte algo de ropa antes de que se me vayan más las manos - Te besó en la base del cuello.

Te giraste y plantaste un suave beso en sus labios mientras lentamente te despegabas del. Fuiste de nuevo al cuarto de baño para vestirte y secarte el pelo.
Niall te esperaba apoyado en la puerta de tu habitación, se veía tan sexy con la cabeza echada hacia atrás y los ojos cerrados, no te pudiste resistir a abrazarle mientras le besabas el cuello. Sentiste como vibraba su cuello a través de tus labios.

Tu: Ya estoy - Te separaste.
Niall: Estas hermosa - Te admiraba de arriba a bajo.

No querías discutir con él diciéndole que no lo estabas así que simplemente le sonreíste mientras te echabas los mechones de pelo hacia un lado. Cogiste tu bolso y salisteis de tu cuarto cerrando la puerta, para tu sorpresa Niall entrelazó sus dedos con los tuyos en una agarre fuerte. Te enamoró el gesto. El te guió hacia su coche sin soltarte, te abrió la puerta del copiloto y te dejó montar, viste como se subía al instante por la puerta del conductor. Seguía teniendo la sonrisa en su cara desde el primer momento que le viste entrar por la puerta, al igual que tú, eso te inundó de alegría.

Tu: ¿Dónde vamos?
Niall: A un sitio que no está muy lejos de aquí.

Te dejó con toda la intriga. Arrancó el coche y lo puso en marcha a través de la oscura noche. El camino fue silencioso, nadie hablaba, quizás porque no teníais nada que decir, tu más bien que nadie sabías que las palabras a la hora de expresar los sentimientos no servían de mucho, tan solo para crear falsas esperanzas, pero esas miradas, esos besos, esas carias... sabías que eso no se podía fingir. Niall aparcó el coche delante de un edificio a las afueras de tu urbanización, miraste a través del cristal del coche para admirar todas las luces que se reflejaban en el contrastando con la oscuridad de aquella noche.

Niall: ¿Sales o te cojo? - Te preguntó con la puerta abierta de tu asiento.

Te quitaste el cinturón y saliste del coche. Niall buscó tu mano derecha para volver a cogértela, te sentías tan bien cuando lo hacía. Andasteis hacia la entrada del edificio, él buscó las llaves con su mano suelta y abrió la puerta. Entrasteis en un vestíbulo muy grande, Niall saludó al guardia de seguridad que estaba en el ascensor, sabías que era un guardaespaldas del por como te miraba inspeccionándote de arriba a bajo. Entrasteis los dos solos al ascensor, le dio a la planta catorce y se cerraron las puertas dejándoos a solas.

Niall: Me encanta esa sonrisa que tienes.

Sin darte cuenta estabas mirando el agarre de Niall a tu mano y sonriendo como una tonta.

Tu: A-ah - Reaccionaste.

Él se rió.

Tu: Esto es algo nuevo para mi - Levantaste la mano con la que Niall te agarraba.
Niall: Y-y para mi - Frunció el entrecejo -. Nunca se la he cogido a nadie.

Una alegría inmensa te recorrió todo el cuerpo.

Tu: Eres el primero que me coge la mano.

Te miró sonriendo.

Niall: El primero - Te besó en la frente mientras pasaba su mano por detrás de tu cuello y tu volvías a entrelazar tus dedos con los suyos mientras te aferrabas con la mano derecha a él por detrás de su espalda - Y el único, espero.
Tu: Siempre serás el único - Susurraste para tus adentros.

El ascensor se abrió dejando ver un pasillo con muchas puertas dando lugar a apartamentos de gran lujo. Niall te llevó hacia una puerta roja que tenía en la parte superior ''213'', pasó la tarjeta y te dejó pasar primero. Entraste admirando lo grande que era aquel lugar, tenía dos plantas conectadas por una escalera en espiral en la esquina de la pared, te llamó mucho la atención ya que te encantaban.

Niall: ¿Qué? ¿Te gusta?
Tu: Niall... e-esto es impresionante - Admirabas todo el sitio.
Niall: No tanto.
Tu: ¿Que no? - Te volviste hacia él - Esto te habrá costado un dineral.
Niall: Digamos que puedo permitírmelo.
Tu: Aja - Estabas completamente embobada.
Niall: ¿Quieres algo de beber?

Asentiste con la boca abierta mientras mirabas todo lo que te rodeaba. Le seguiste hacia la cocina y te subiste a la encimera viendo como Niall sacaba las botellas de alcohol para las mezclas.

Tu: ¿Pretendes emborracharme?
Niall: Podría - Dijo dándote tu copa.

Te bajaste y te pusiste a su lado, él se puso enfrente de ti mientras posaba una mano en la encimera, justo al lado de tu cintura, para inclinarse un poco.

Tu: Mmm ¿Por qué me da que ya lo has pensado?
Niall: Te emborracharía - le dio un sorbo a su copa mientras te miraba - Luego te daría besos por todo el cuerpo y tu te dejarías - Dejó la copa a un lado y posó su otra mano al otro lado de la encimera - Y luego te haría el amor - Sentías su aliento a alcohol rozando tus labios y como el nudo de la barriga te daba punzadas en tu sitio más intimo.

Le diste un sorbo a tu copa, igual que él lo había hecho antes, y la dejaste a un lado.

Tu: Podrías - Le besaste.

Te besó en la frente y se separó de ti. Cogió las copas y te miró para que le siguieras hacia el salón. Pasasteis horas hablando de cosas que el alcohol borró de vuestras mentes al día siguiente, os dabais besos y caricias mientras tanto. Sabías que Niall jamás te haría nada sin tu consentimiento, él sabía donde estaban tus limites y borracha o no lo respetaría.


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miércoles, 24 de julio de 2013

Hear Me en Wattpad.

¡Hola! Quería informaros de que ''Hear Me'' está publicada en Wattpad también, ahí está algo más desarrollada que en el blog, aunque solo he subido el primer capitulo.

Si le queréis echar un vistazo podéis ir pinchando aquí. Muchas Gracias.

Si tenéis alguna duda sobre algo ya sabéis que podéis hablar conmigo en @backforbritish  o por comentarios en este blog o en Wattpad.

Hear Me - Capítulo 29

Tenías sus dedos entrelazados en los tuyos, su aliento caliente te rozaba los labios mientras mirabas aquellos ojos azules en los cuales te perdías siempre cuando fijabas tu vista en la beta blanquecina, eran los ojos más hermosos que jamás antes habías visto y esos ojos se posaban en ti admirándote de pies a cabeza. La frase de Niall aún te seguía revoloteando por la cabeza ¿Que quiso decir con eso de que no se fue nunca? Inconscientemente arrugaste el entrecejo mientras bajabas tu mirada. Él levantó tu cara poniendo sus fuertes dedos debajo de tu barbilla.

Niall: ¿Por qué pones esa cara? - Te besó en el entrecejo.

Volviste en ti mientras Niall despegaba sus labios de tu frente dando pequeños besos al rededor de tu mejilla derecha. Siguió con su camino de besos hasta tus labios y los apretó junto a los suyos de nuevo.

Tu: Mmm - Gemiste cuando notaste la gran mano de Niall presionándote por la espalda para que te pegaras a él.

La gran mano izquierda de Niall aún seguía en tu barbilla cuando te hizo girar la cara para seguir con sus besos hasta tu cuello. Abriste la boca para aumentar el flujo del aire que necesitabas ya que tu respiración se había vuelto irregular con las caricias que Niall dejaba sobre tu cuerpo y tu cuello. Subió por tu cuello hasta morder el lóbulo de tu oreja y dar un beso justo detrás de ella, él sabía que eso te hacía estremecer por tus extremidades.

Tu: Ni-Niall... - Suplicaste sin aliento.

Niall echó hacia tras la cabeza mientras te miraba divertido.

Niall: Quiero probarte de nuevo - Dijo descaradamente.

Sus palabras se engancharon en tu torpe respiración. Recordaste tu primera vez con Niall, fue un desastre para ti, eras tan inexperta en todo relacionado con el sexo, pero por otra parte recordaste el placer incómodo que se apoderó de ti.

Tu: Niall... yo-yo no sé - Decías nerviosa.
Niall: Tranquila, no digo que sea ahora - Sus palabras fueron como un calmante para tu respiración -. Tan solo que quiero sentirte de nuevo.

La vergüenza se pudo vislumbrar a través de tus mejillas sonrojadas más de lo normal. Pensabas que después de tu primera vez Niall no quería volver a hacerlo, te sentías estúpida ante la idea de dar placer a otra persona con tu cuerpo, asimilabas que en ti no había nada que pudiera llamar la atención de esa manera, pensabas que quizás la mente pervertida de Niall sea la causa por la que quería hacerlo de nuevo. La idea te disgustó mucho. Te separaste del y fuiste hacia tu cama para coger una maleta y abrirla, él se apresuró a tu lado sentándose al lado de la maleta y presionando con su mano en ella para que no la abrieras.

Niall: Eso lo puedes hacer después - Sugirió -. Ven aquí - Se tocó con las manos sus muslos.

Le miraste recelosa, Niall bajó la maleta para tener más sitio y te cogió de la mano para que lentamente te sentaras encima de su regazo. Se apoyó en el cabecero de la cama mientras acomodaba unos cuantos cojines debajo de tu espalda. No perdías ni un detalle de su rostro mientras lo hacía, le veías tan adorable. Plantaste un beso en sus cálidos labios lo que a él le cogió por sorpresa.

Niall: Quiero más - Dijo poniendo ojitos cuando te separaste del.
Tu: Antes me vas a tener que explicar unas cosas Horan - Te acomodaste en sus brazos.
Niall: Pregunta - Dijo en tono desafiante.
Tu: ¿Ali te llamó para irte con el cuento?
Niall: ¿Acaso eso importa?
Tu: Horan - Le diste un codazo suave en su pecho.
Niall: Auh - Se quejó bromeando.

No pudiste evitar las ganas de reírte, él bajó la cabeza para darte otro beso mientras te reías en sus labios.

Niall: No te burles de mi - Se quejó de nuevo bromeando mientras su toque se hacia más caliente.
Tu: Para Horan - Le separaste.

Él se echó hacia tras de nuevo algo descontento.

Tu: ¿Me lo vas a decir o me pongo a doblar ropa? - Le chantajeaste mientras señalabas la maleta.

Él resopló a modo de derrota.

Niall: Me llamó, pero dijo que no te contara nada.
Tu: Dios, la mato - Abriste los ojos como platos.
Niall: ¿Con tu fuerza? Já, lo mínimo que harías sería hacerle cosquillas - Se burló de ti para quitarle tensión al tema.

Abriste la boca a modo de incredibilidad.

Tu: ¿Qué? - Le miraste aún con la boca abierta.
Niall: Que no tienes fuerza.
Tu: Te vas a comer tus palabras - Te reíste mientras le empujabas a tenderse en la cama y saltabas encima del con tus piernas a cada lado de su muslo.

Le presionaste con tus manos en cada hombro para inmovilizarlo.

Niall: Mmm...
Tu: ''Mmm'' ¿Qué? - Levantaste una ceja mientras le presionabas contra el colchón.

Niall señaló con sus ojos a tus caderas, cuando miraste viste que la mini falda que llevabas se te había subido hasta el vientre dejando ver la parte de abajo de tus braguitas. Corriendo te quisiste bajar pero él se apoderó de tus muñecas poniéndolas por encima de tu cabeza haciéndote girar en la cama y subiéndose a horcajadas encima de ti.

Niall: La posición de antes me gustaba más, pero así me seguro de que no te vuelvas a ir.

Sabías que él estaba refiriéndose a tu escapada para ir a tu ciudad, en ese justo momento pensaste que él no te refirió nada de tu operación, quizás Ali no le había contado todo y eso te tranquilizó.

Tu: Suéltame - Te agistaste debajo del en un intento fallido de ser libre.
Niall: Lo ves, no tienes fuerza - Se rió.

Las palabras de Niall te dieron justamente en el orgullo, le ibas a hacer que se arrepintiera de cada una de las palabras que pronunció en su ultima frase. Agarraste con fuerza las manos de Niall y las quitaste de tus hombros para debilitar tu equilibrio y hacer que se cayera a un lado de la cama, volviste a recuperar el control de la situación, una risita se te escapó de los labios mientras pensabas en tu próximo movimiento. Sabías que tu falda seguía apretada a tu vientre mientras que la parte de abajo se ceñía a tus caderas, más alta de lo que estaba la primera vez por el movimiento al cambiarte de nuevo a tu posición enseñando toda tu braguita. Un rubor se apoderó de tus mejillas cuando veías a Niall morderse el labio inferior. Inclinaste tu cabeza hasta ponerla a centímetros de la suya.

Tu: Vamos a comprobar la fuerza que tienes tu - Le desafiaste.

Miraste hacia el bulto que sobresalía pantalón de Niall. Lentamente y sin dejar de mirarle bajaste las caderas, Niall dio un gemido ahogado cuando le acariciaste lentamente hacia delante y hacia atrás su prominente bulto, le encantaba el juego. Volviste a subir tus caderas mientras le besabas.

Niall: Más fuerte - Suplicó.

Bajaste de nuevo las caderas para encontrarte con su miembro más voluminoso y rígido que antes. Un suspiro brotó de vuestros labios cuando volviste a frotarle con más fuerza un número repetido de veces. Niall subió las manos por tus muslos, apretándolos, mientras gemía de placer, te sorprendiste cuando te diste cuenta de lo que podías crear en Niall con tan solo unos roces. Él siguió hacia delante con su tacto hasta tu falda y la subió entera por encima de un ombligo mientras que tu seguías rozándole con tu sensibilidad y dejandole besos por todo el cuello.

Niall: Pa-pa...ra - Decía con dificultad entre gemidos.

Hiciste caso omiso a sus suplicas, era una venganza contra él, querías tenerle así aunque lentamente tu ibas cayendo en tus propias redes. Niall ahueco la mano en tu trasero para bajarlo y presionarlo con más fuerza. Gemidos se oían por toda la habitación más caliente de lo normal. Niall estaba llegando a su clímax, le sentías tan duro debajo de ti. En ese momento levantaste tus caderas y dejaste de rozarle. Bajaste la cabeza hasta su oído.

Tu: ¿Quien es ahora el que no tiene fuerzas? - Le besaste en el cuello mordiéndole suavemente.
Niall: Baja - Te presionaba las caderas hacia bajo mientras cerraba con fuerza los ojos.

Necesitabas bajar y volver a hacerle sentir como hace unos instantes, te daba tanto placer hacerle sentir bien, le veías en tu cama desesperado por un simple roce más. Subiste con tu lengua por toda la linea de su cuello y terminaste con un beso apasionado en sus labios.

Niall: Mmm tendré que hacerte enfadar más a menudo - Rió - Ahora baje y termine si no quiere que la obligue - Podías ver su diversión mezclado con furia en sus ojos celestes.

Niall volvió a presionar hacia abajo al ver que no te bajabas, hundiste tu cabeza entre el hueco de su cuello mientras él hacía todo el trabajo frotando en un vaivén vuestras caderas, gemidos desesperados salían de vuestros labios, vuestras respiraciones pesadas y calientes se vieron forzadas cuando Niall dio una envestida final contra tu braguita húmeda. Te quedaste encima de su pecho durante un tiempo mientras te abrazaba recuperándoos de vuestras acciones calientes. Niall te apartó el pelo que te cubría la cara y lo pasó por detrás de tu oreja pero no pudo al toparse con el aparato. Cerraste los puños con fuerza mientras él te abrazaba aún más fuerte y depositaba besos en tu cabeza.

Niall: Eres sorprendente.

Rodaste hacia su lado izquierdo aguando tu peso de lado mientras él se giraba hacia ti. Os mirabais fijamente, perdisteis la noción del tiempo entre caricias y besos salpicados entre los dos.

Tu: ¿Por qué soy sorprendente?

Niall suspiró.

Niall: Difícil de explicar - Te acarició la mejilla.

Le mirabas fijamente a sus labios claros algo hinchados por todos los besos que le diste, su mandíbula definida al final del cuello, su barbilla sobresalida de ella te parecía tan sexy, sus ojos fijando la vista en ti haciéndote sentir un hormigueo por tus adentros tan placentero. Te parecía el hombre más sexy del mundo, pero no todo se reducía a sus rasgos, lo risueño que es contrasta con su personalidad caliente y excitante.

Niall: Me tengo que ir, pequeña - Te dio un beso en la mejilla.
Tu: No, por favor - Te aferraste a su cuello.
Niall: Tengo que arreglar unos asuntos - Viste la tristeza en sus ojos.
Tu: Quédate conmigo - Suplicabas en su pecho.

Sentiste como Niall suspiró fuerte. Te agarró de la mano y te separó lentamente mientras veía en tu expresión una mueca de dolor.

Niall: Odio estar lejos de ti, pero tengo obligaciones y tengo que cambiarme - Sonrió picantemente.
Tu: ¿Cuando te veré?
Niall: Pronto.
Tu: ¿Eso cuanto es? ¿Una hora? ¿Dos? ¿Un día? - Apretaste su mano.

El te soltó y se incorporó reajustándose el pantalón a su cintura.

Niall: He venido por ti, porque no puedo... - Su voz se quebraba a medida que terminaba la frase.

Le diste tiempo para continuar la frase pero él no lo hacía, parecía que estaba lleno de temor.

Tu: ¿Por qué no puedes qué?

Él se agachó y te dio un beso en la frente.

Niall: Luego te veo, pequeña.

Veías dolor en sus ojos cuando te miraron para dedicarte una sonrisa de despedida en la puerta de tu habitación. Te quedaste congelada en la esquina de tu cama cuando le viste desaparecer. ¿Que le pasa? Niall te había dejado algo insegura después de sus palabras. Te tumbaste en el sitio donde él había estado tumbado e inspiraste el aroma de Niall aún presente entre las sabanas calientes.
Tenías que decirle tantas cosas y él tenía que aclararte tantas dudas.

Un aparato vibrando en tus caderas te despertó de tu profundo sueño. Palpaste con tus manos hasta encontrarlo y ponerlo delante de tu vista. La luz del móvil te cegaba por momentos. Dibujaste hábilmente el patrón y respondiste a la llamada.

- ¿Diga? - Dijiste con la voz ronca por dormir.
- ¡Hola amiga! - Sonó la voz por la otra línea. 

Supiste quien era nada más por como su voz de pito resonó en tu aparato.

- ¿Amiga? Yo te mato Alicia, te juro que te mato.
- ¿Sabes? Por una vez me alegro de estar lejos para que por la noche no tomes represalias conmigo - Se rió - ¿Como estas? 
- No cambies de tema ¿Como le pudiste decir a Niall que me había venido? 
- Será cabrón, le dije que no dijera nada. 
- No me lo ha dicho él - Le mentiste para encubrir a tu chico -. Lo supuse y tu lo has confirmado. 
- Uups - Se rió -. ¿Y ya te ha llamado echándote la bronca? 
- ¿Llamarme? - Te reíste sarcásticamente - Ha venido por mi.
- ¡No me jodas! ¡Ay, que chico más romántico de verdad! - Se emocionó.
- ¡Callate! - Te volviste a reír, pero esta vez de verdad -. Dime ¿Que le dijiste? 
- Tranquila... no le dije nada de tu operación.

Un suspiro de alivió se te escapó mientras te tumbabas de nuevo en tu cama.

- No le quise decir nada - Ali continuó -. ya que pensaba que él solo te llamaría y tu se lo terminarías diciendo.
- Pero Ali ¿Por qué coño te metes?
- Porque te estoy haciendo un favor.
- No, me estás poniendo entre la espada y la pared.
- ¿No se lo ibas a decir a Niall?
- Si... pero... - Dudabas como continuar la frase.
- Si pero nada, díselo, dile que te van a operar, es una tontería no decírselo.
- Odio cuando llevas la razón - Susurraste.
- Cariño, díselo, antes de que sea demasiado tarde.

Te quedaste en silencio, tan solo querías cambiar de tema.

- David me ha estado preguntando por ti ¿Sabes? - Ali captó la idea del cambio de tema.
- ¿Como está? 
- Igual de bueno que siempre.

Tu risa inundó toda la habitación.

- Tonta -. Le dijiste de broma.
- Pues nada, dice que quiere ir a verte.
- ¿¡Qué!? - Diste un bote saltando fuera de la cama.
- ¿____? ¿____, estas ahí?

La simple idea de que Niall y David estuvieran juntos hacía que los nervios rebosaran por cada poro de tu piel ¿Que pasaría si se encontrasen? No te lo querías ni imaginar.


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domingo, 21 de julio de 2013

Hear Me - Capítulo 28

Necesitabas sentir la caricia de sus suaves labios en los tuyos, ansiabas desde hace tiempo el calor que Niall te daba con sus fuertes abrazos, él te hacia sentir como nadie lo había hecho antes, él era el único, él siempre será el único. 

Tu: Bésame - Le volviste a suplicar mirando aquellos finos labios.

Niall acercó sus labios a los tuyos sin dejar de mirarte a los ojos y los juntó en una suave caricia. Levantaste tus manos hasta su pelo enredando tus dedos en el para acercarle aún más mientras que Niall te daba un fuerte abrazo. Él te estaba besando de una manera que jamás lo había hecho hasta el momento, te besó como si su vida dependiese de ello, como si su boca se asfixiara y en tu cuerpo encontrara el oxígeno que necesitaba. Le agarraste aún más fuerte del pelo lo que hizo que gimiera en tus labios dándote un escalofrío de placer desde tu pecho hasta la coronilla. Necesitabas parar, te estabas quedando sin aire. Bajaste las manos hasta su pecho para empujarle hacia atrás, pero él no lo hacía, no se separaba de ti, no te dejaba de besar. Notabas como te agobiaba todo a tu alrededor.

Tu: Ni-Niall - Mascullaste con dificultad entre sus besos -. Para p-por favor.

Le empujaste con fuerza y al fin se separó de tus labios sin dejar de abrazarte. Cogiste una bocanada de aire desesperadamente al instante.

Niall: Perdón ____, no me estaba dando cuenta - Dijo asustado.
Tu: No pasa nada - Volvías a recuperar el aliento poco a poco -. Ven.

Le cogiste de la mano y le jalaste por las escaleras hacia tu cuarto pero os parasteis delante de tu puerta cerrada. Recordaste los posters que tenías del, no querías que los viera ¿qué pensaría? te ruborizaste al pensarlo.

Niall: Eh - Te volteo y te cogió de la mandíbula en una suave caricia para que me mirases - ¿Puedo saber que pasa por tu mente?
Tu: A-ah, ¿puedes esperarte un momento? 

Niall te miró con el entrecejo fruncido, estaba algo confuso.

Niall: ¿Qué? ¿Por qué? ¿Qué tienes en tu habitación? - Dijo divertido.
Tu: Nada, tan solo que está un poco desordenada - Pensaste rápidamente una excusa. 
Niall: ¿Por qué no me lo creo? - Susurró. 
Tu: Niall, por favor, serán tres segundos.

Él levantó tu cara algo más para dejar un beso en tus labios algo hinchados por el anterior beso que casi termina ahogándote. 

Niall: Esta bien, no tardes baby.

Le miraste a los ojos y le sonreíste pícaramente. Corriendo entraste en tu cuarto y quitaste los posters de las paredes, por un momento agradeciste a tu padre por no dejarte colgar muchos en tu habitación. Tenías todos los posters en las manos, mirabas ansiosamente a todos los sitios donde los podrías esconder, posaste tus ojos debajo de la cama y corriendo los metiste debajo. Revistaste por última vez si te habías dejado algún poster o algo mientras ibas a abrir la puerta, no había nada «Menos mal» resoplaste. Al abrir la puerta viste a Niall con en brazo levantado apoyándose en el quicio y el con otro agarrándose el costado derecho, te quedaste sin palabras, estaba tan sexy, tan provocador y él lo hacía a sabiendas de lo que provocaba en ti.

Niall: ¿Ya? - Te sonrió.

Apenas pudiste contestar, asentiste torpemente mientras te dabas la vuelta y entrabas a la habitación para que no apreciase lo nerviosa que estabas. «Tranquilízate» te recordabas. Suspiraste y te giraste para encontrarte de nuevo con los ojos de Niall posados en ti. Él cerró la puerta y se apoyó en ella con los brazos cruzados. No dejabas de mirarle ¿Por qué era tan hermoso? Sin pensar el beso de antes te alcanzó la mente sumiéndote en una duda ¿Por qué te había besado así? Inconscientemente frunciste el ceño mientras bajabas la cabeza. Niall se acercó a ti, viste sus grandes vans al lado de tus diminutos pies, lo que te hizo sonreír, subiste con la mirada por aquellos largos pantalones vaqueros, por aquella camiseta blanca, por sus gafas de sol colgadas en el cuello de ella, por su deseable cuello, por sus finos labios también hincados haciendo una curva hacia arriba dibujando esa sonrisa que tanto te enamoraba y por sus ojos azules con esa beta blanquecina cerca de su pupila, era hermoso, más hermoso que cualquier persona, como un ángel. Te mordiste el labio deseando que él volviera a hacerlo como antes. Te rodeo con sus brazos por tu cintura atrayéndote a el.

Niall: Ojalá pudiera saber que es lo que pasa por tu cabeza.

Pestañeaste mientras que hundías tu cabeza en el hueco de su cuello. 

Tu: ¿Por qué me has besado así antes? 

Notaste como la respiración de Niall se hacia más pesada, te volviste a incorporar acariciando su pecho a través de la tela blanca que le cubría.

Niall: Ni yo sé porqué te bese así - te soltó.

Le miraste incomprendida por su revelación.

Niall: He... He estado mucho tiempo lejos de ti - Parecía como si le costara la misma vida hablar en aquel momento -. N-no sabes... no tienes ni idea de como me sentía. 

¿Quién era el chico asustado que tenías delante? ¿Y su seguridad ante todo? Normalmente eras tú la que hablaba con dificultad a la hora de expresarse, no él. Al verle así se te encogió el corazón, le veías confuso, triste ¿Por qué? No sabías que hacer en ese momento. Niall se dio la vuelta mientras alzaba los brazos hacía su cabeza y hundía sus manos en su pelo entrecruzando los dedos. 

Niall: Mierda ¿Por qué causas esto en mi? 

Eras incapaz de decir nada antes esas palabras que tan bien comprendías. Él causaba lo mismo en ti algo tan fuerte que jamás lo podrías expresar con palabras. Niall no se daba la vuelta y tú ansiabas por volver a mirarle a los ojos. 

Niall: Me da miedo.
Tu: ¿Miedo? - Reaccionaste sin pensar.

Veías como sus hombros subían y bajaban fuertemente en un suspiro sordo para ti. Se dio la vuelta lentamente hundiendo sus manos en sus bolsillos, por fin le pudiste mirar a los ojos. 

Niall: No lo sé... miedo de que esto se me vaya de las manos... de perderte... - Decía confuso.

Sentías dolor en sus palabras. 

Tu: Nunca me iré - Andaste hacia él parándote justamente cuando te rozó con las yemas de sus dedos en tus nudillos.
Niall: Si decides irte ten en cuenta de que iré a por ti - Entrelazasteis los dedos de las manos mientras que él te acariciaba el dorso de las tuyas con sus dedos pulgares. 

Te dejó completamente paralizada con esa frase ¿Estaba dispuesto a hacer eso por ti? En ese momento recordaste cuando lo viste sentado entre las butacas rojas del gran escenario, le habías dejado claro que no querías verle aunque claramente no lo dijiste con sinceridad, tan solo querías verle feliz y no ser una carga para él, y lo más sorprendente es que volvió.

Tu: Siempre lo has hecho, siempre has vuelto - Susurraste con una sonrisa.
Niall: Nunca me fui. 


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Novela de Niall

¡Hola! Solo quería informaros de que le he puesto nombre la novela de Niall, se llamará ''Hear me'', a partir de ahora los capítulos no tendrán nombre, tan solo serán ''Capítulo x de Hear Me''. Quería avisaros para que no os liaseis a la hora de buscar un capítulo y de paso saber si os gusta o no (Comentarme si os gusta el nombre o no).
Otra cosa que os quería decir es que hay una nueva encuesta en el blog sobre la novela (fanfic) de Liam Payne, para cambiar un poco el tipo de novelas que estoy acostumbrada a escribir, podéis votar si queréis que siga siendo (TÚ) la protagonista o un punto de vista desde un (YO) os lo dejo a vuestra elección.
Si queréis comentarme algo de las novelas ya sabéis que podéis hacerlo en @backforbritish, si lo queréis hacer en anónimo también podéis en mi Ask http://ask.fm/IreeDirectioner. Gracias, x.

  @backforbritish 

sábado, 20 de julio de 2013

Hear Me - Capítulo 27

Intentaste retener la mirada penetrante de Niall en tus ojos, fue un intento fallido, tragaste saliva y miraste hacia otro lado intentado recuperar el equilibrio al ponerte de pie.

Niall: Hola preciosa - Se mordió el labio inferior reteniendo las ganas de besarte.
Tu: Dios mio Niall - Decías aun sin poder mirarle -. ¿Qué haces aquí? - Te apartaste un mechón de la cara.

Él miró hacia los guardaespaldas que estaban justo detrás del antes de volver a posar sus ojos en tus labios.

Niall: ¿Podemos irnos a otro lugar?
Tu: Ni-Niall, yo... no puedo, mi padre está esperándome.

Te preguntabas por qué te ponías tan nerviosa al verle si le habías visto millones de veces. Tenías tantas ganas de tenerle entre tus brazos de nuevo y de besarle... pero no, no era el momento, había demasiados ojos posados en vosotros.

Niall: - suspiró -. Joder, quiero estar contigo ya - Masculló.
Tu: Y yo - Le sonreíste -. Tienes que explicarme que demonios haces aquí y porqué no me has dicho nada.
Niall: Por lo mismo que tu no me has dicho que venías - Volvió a clavar sus ojos en ti.

Tu móvil empezó a vibrar en tu bolsillo trasero, diste un salto del susto. Niall sonrió pícaramente mientras te veía rebuscar en tus bolsillos traseros el pequeño aparato del demonio. Dibujaste el patrón y viste que tenías un WhatssApp.

| Papá |
- ¿Dónde estás? Estoy fuera esperándote, pero hay mucha gente, si quieres entro a buscarte. 8:55.

«Mierda» una punzada de nervios volvió a apoderarse de ti. No querías que tu padre te viera con Niall, o por lo menos no por ahora.

Tu: Dame tu móvil - Le tendiste la mano.

Él sin pensarlo dos veces lo sacó y te lo entregó. Miraba atentamente lo que hacías con su iPhone aunque tú no le dejabas ver mucho. Después de haber terminado se lo entregaste de nuevo.

Niall: ¿Que hiciste? - Achinó los ojos.
Tu: Te dejé mi dirección, pero te lo advierto Niall, avísame siempre que vengas.
Niall: La gracia está en la sorpresa.
Tu: Niall - No pudiste retener las ganas de reírte -. Tonto, lo digo en serio - Aun que le estabas hablando seriamente tu tono de voz era muy animado, sin duda verle ahí junto a ti de nuevo te llenaba de alegría - Me tengo que ir ya... adiós Niall.

Levantó su mano izquierda hasta tu mandíbula para atraerla hacia él, cuando apenas os separaban milímetros se paró dejándote con ese ardor en los labios que solo te podrías quitar si le besabas.

Niall: Hasta luego, princesa - Susurró.

Sacudiste la cabeza volviendo en ti, pestañeaste un par de veces hasta que por fin te diste cuenta de que casi besas a Niall en público. La simple imagen de que la gente os viera hacía que el rubor de tus mejillas aumentara. Le dedicaste un cálida sonrisa mientras agarrabas tu maleta para irte.


Viste al otro lado del aparcamiento un hombre alto, trajeado y minuciosamente peinado, al instante supiste de quien se trataba. Aceleraste tu paso hasta llegar hacia él y abrazarle.

Tu padre: Hola hija, ¿qué tal el viaje?
Tu: Bien, papá, aunque creo que te has excedido demasiado... no hacía falta que me cogieras la clase vip.
TP: Quería que te sintieras bien - Dijo cogiendo tus maletas y llevándolas hacia la parte trasera del coche.
Tu: Si y gracias, pero no quiero que gastes tu dinero innecesariamente - Le seguías con la mirada.

Tu padre se quedó en silencio mientras montaba las maletas en el coche, cerró la puerta de un portazo y se dirigió de nuevo hacia donde le habías visto por primera vez. Le mirabas algo confusa ¿Habrías dicho algo mal? Tu padre descansó la espalda sobre la puerta del coche.

Tp: La última persona que me dijo eso fue tu madre.

Arrugaste el entrecejo al pensar que se había puesto de los nervios tan solo porque le recordaras a tu madre.

Tp: Está bien, ni si quieras has pasado diez minutos conmigo y ya estamos mal.
Tu: Yo no lo estoy.
Tp: Pensé que si... - Se quedó mudo al ver como le mirabas.

Diste la vuelta al coche para subir por la puerta del copiloto. Por el rabillo del ojo viste a tu padre entrar y ponerse el cinturón a la misma vez que él miraba si tu lo tenías puesto. Pusiste los ojos en blanco ante ese hecho «Por el amor de Dios, no tengo diez años» pensaste. Tu padre te miraba como si fueras un libro, estaba pendiente de cada detalle y sabías porqué te miraba así cuando apartó el pelo que te cubría el aparato.

Tp: Odio como te queda - suspiró.

Te incomodaste un poco ante su revelación. Te moviste en el asiento para deshacerte de su mano tocando tu aparato inspeccionadolo al completo.

Tp: Perdón, se que no te gusta.
Tu: N-no pasa nada - Giraste tu cabeza hacia la ventanilla para evitar su mirada.

Al hacerlo viste un coche negro muy familiar como a unos veinte metros de donde os encontrabais tu padre y tú. Dentro del coche tu padre seguía hablándote aunque tú a penas le escuchabas. No dejabas de mirar aquel coche negro ¿De que te sonaba tanto? Las ventanas estaban totalmente tintadas y eso te impedía más la visión cuando querías averiguar si había alguien dentro. Viste como la ventanilla de aquel coche bajaba, achinaste los ojos cuando de repente los abriste como platos, sin ninguna duda, era el coche de Niall.

Tp: Eh ____, ¿estás bien? - Te agarró de la muñeca para traerte de nuevo a la conversación con él.
Tu: ¿Q-que? Oh... si, perdona papá.
Tp: ¿Qué mirabas con tanto...
Tu: Nada papá, nada, creía haber visto a alguien pero no... - Le interrumpiste nerviosa.

Tu padre hizo un gesto de incomprensión mientras arrancaba el coche. Por el espejo retrovisor viste como los faros del coche de Niall se encendían a la misma vez que los de tu padre ¿Te iba a seguir? De nuevo un mar de mariposas recorrió toda tu barriga. El motor del coche se puso en marcha salisteis de aquel oscuro aparcamiento. Bajaste la ventanilla para hacer que el aire entrara dentro del coche y así romper el silencio que se había creado entre vosotros dos. Sacaste la mano por la ventanilla para hacer olas entre el aire que empujaba tu mano a gran velocidad, te encantaba notar que tocabas el aire mientras que lo dejabas escapar entre los huecos de los dedos, tu padre te miró y sonrió  al verte tranquila. Tu padre paró el coche delante de una enorme casa que estaba en el centro de una urbanización de la cual recordabas. Te bajaste del sin dejar de mirar aquella casa. Tu casa. Cerraste la puerta y te dirigiste al pequeño caminito formado por largas y finas rocas minuciosamente colocadas entre aquel césped hacia llegar hasta las puertas de tu casa, tiempo atrás hubieras jugado a pisar las lisas y finas rocas con cuidado de no pisar el césped, al recordarlo una pequeña sonrisa se pudo vislumbrar en tu cara. Tu padre llegó por detrás con tus maletas, abrió la puerta y tendió la mano hacia dentro de la casa para que entraras tú primero. Agradeciste el gesto con una sonrisa.
Un olor familiar inundó tus sentidos llenándote de recuerdos. Fuiste hacia el salón, estaba exactamente igual que el día en que lo dejaste, las fotos encima del mueble de la televisión, una mesa enorme presidiendo la sala, unos pequeños sillones a un lado para tener un espacio más acogedor... todo estaba exactamente igual... como si nada hubiera pasado, como si todo siguiera igual. Miraste a tu padre subiendo las escaleras hacia la parte de arriba, le seguiste apresurándote detrás del. Pasaste por delante de la habitación de tus padres cuando te paraste en seco al ver un vestido de tu madre colgado en el respaldo de una silla, un escalofrío recorrió las puntas de tus dedos cuando te acercaste a tocarlo, lo agarraste con fuerzas y te lo acercaste a la cara para olerlo... hacía tanto que no recordabas su aroma, era indescriptible, el mejor perfume que jamás se había creado. Abriste los ojos en un suspiro mientras dejabas el vestido tal y como estaba en la silla. Saliste del cuarto cuando sin querer te chocaste con tu padre.

Tu: Oh... perdón papá - Dijiste preocupada.
Tp: No pasa nada cielo, pero ten más cuidado.

Asentiste sonriendo.

Tp: Por cierto ____, tengo que ir a la oficina.
Tu: ¿Qué? - Tu enfado se podía ver a través de tus labios fruncidos.
Tp: Sabes como es mi trabajo.
Tu: Pero yo quería pasar el día contigo, papá, como tú dices no llevo ni medio día aquí.
Tp: Lo siento tesoro, haré lo posible por terminar cuanto antes y venir.

Suspiraste dejando ver tu desaprobación. En ese momento Niall pasó por tu mente como una ráfaga de viento. Podrías aprovechar para verle.

Tu: Bueno, no importa.
Tp: El domingo lo pasaré entero contigo.
Tu: ¿El domingo? Pero eso de dentro de cuatro días - Dijiste con asombro.
Tp: Cielo, lo siento.

Viste con la sinceridad que te dedicó esa frase, le apretaste la mano y le perdonaste, en cierto modo lo comprendías. Tu padre se fue a su despacho dejándote a solas en la puerta de tu habitación. Palpaste el pomo y lo giraste abriendo la puerta sintiendo un chirrío familiar. Lo primero que viste fue un póster de One Direction justo enfrente de ti, al fijarte en Niall sonreíste como una tonta. Cerraste la puerta detrás de ti entrando aún más en la habitación. Veías los CD's en las estanterías blancas, todos los libros que te habías leído hasta el momento, tu antiguo escritorio y tu armario vacío. Cogiste los CD's buscando uno en especial, rebuscaste entre los que tenías hasta encontrarlo ''Up All Night''. Rozaste las yemas de tus dedos sobre la portada del álbum. Un pequeño suspiro cayó de tus labios.

Tp: Cariño, me tengo que ir - Gritó apara que le escucharas mejor desde abajo.
Tu: Vale, ten cuidado, adiós.

Apenas sentiste el portazo que tu padre dio al salir.
A los cinco minutos notaste como el móvil volvía a vibrarte en el bolsillo, lo sacaste y viste la notificación.

| Niall |
- Bonita casa. 9:36
| Tú |
- ¿Cómo? ¿Dónde estás? 9:36
| Niall |
- ¿Tú dónde crees? Ábreme la puerta baby. 9:38

Corriste hacia la puerta y la abriste, al otro lado viste a Niall con sus gafas de sol y su sonrisa iluminado aún más tu día.

Tu: Oh, Dios mio - Agarraste desesperadamente de la mano a Niall para meterlo dentro de la casa.

Cerraste la puerta y Niall te puso contra ella sujetándote para inmovilizarte, el juego empezaba ahí.

Niall: Mmm, bonita casa.
Tu: A que si - Le respondiste con aire juguetón.

El te apretaba las muñecas contra la puerta, eso te estaba incomodando un poco así que te intentaste mover hacia un lado pero no pudiste ya que Niall te sujetaba con mucha fuerza. Sin querer al moverte le rozaste la entrepierna con tu cintura lo que le provocó un gemido ronco.

Niall: Mmm, Dios, no hagas eso, no llevo protección encima.
Tu: Ugh, Niall eres tonto -  Te reíste.

No lo hiciste con intención pero te alegraste de haberlo hecho. Niall se apartó dejando tus manos libres, se quitó las gafas dejando ver sus perfectos ojos azules. Cada vez que le mirabas te parecía más hermoso. Te puso sus manos en tu cintura atrayéndote a él, rozó la punta de su nariz con tus labios y le diste un leve beso.

Niall: No te vuelvas a separar de mi - Juntó su frente a la tuya -. No sabes cuanto he necesitado tu calor.
Tu: Bésame - Le suplicaste.


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lunes, 15 de julio de 2013

Hear Me - Capítulo 26

Después de que colgaras a Niall sin decir nada más él te volvió a llamar unas seis veces, mirabas desde tu cama como el móvil vibraba y se iluminaba en la mesita de noche. Agarraste con fuerza la almohada y la abrazaste inspirando hondo mientras que intentabas no derrumbarte, tenías miedo, mucho.
El estruendo de la alarma te despertó. Palpabas con tus dedos hasta la mesita para coger el móvil y ver la hora ''5:30''. Te levantaste a regañadientes. Cuando fuiste a levantar la persiana y a abrir las cortinas miraste aquel cielo con tonos rosáceos por el amanecer, merecía la pena levantarse temprano nada más que por ver tal paisaje. Recorriste con tus manos el pomo de la puerta y lo giraste para abrirla. Inspiraste hondo y saliste al balcón. Hacía mucho frío como para salir descalza y con una camiseta ancha, pero eso no te importó, tan solo querías salir para recordar mejor aquella noche en la cual Niall subió por los barrotes del balcón hasta tu habitación, apretaste los barrotes con fuerza al recordarlo.

Tu: Tengo miedo, mamá - Susurraste - ¿Y-y si no sale bien? Ahora puedo escuchar algo mejor, quizás con el tiempo puedo volver a oír como antes ¿Por qué mi padre no lo comprende? - Inspiraste hondo y soltaste un especie de vapor blanquecino por el frío - Quiere que sea como... Como tú, mamá. Lo haré por él, por ti... por Niall, por no irme de su lado - Miraste al cielo con desesperación, las lágrimas amenazaban con salir de tus ojos en cuestión de segundos - Te quiero mamá, te echo de menos.

Volviste hacia dentro de tu cuarto para ducharte y arreglar las últimas cosas dejando la puerta del balcón abierta.

[Narra Ali]

Estaba en la cocina preparándome una tila, no sabía quien de las dos estaba más nerviosa, si ____ o yo y la verdad es que no sé porque. Estaba muy angustiada por ella, sabía que lo estaba pasando mal, yo la intentaba apoyar, pero sabía que lo que ____ de verdad necesitaba era la presencia de Niall. Oí como bajaba las escaleras con las maletas y corriendo solté el baso de la tila en la encimera para ir a ayudarla.

Ali: Déjame que te ayude - Le cogí las maletas.
Tu: No, déjalo, yo puedo.
Ali: Ay, extrañaré tu cabezonería - Baje las escaleras con una de sus maletas y se la puse en la puerta.

La miraba mientras cogía las llaves de casa de la mesa del comedor, la notaba muy tensa y nerviosa repasando con la mirada todo lo que tenía en la puerta mientras que se palpaba los pantalones en busca de algo. Se sacó del bolsillo de atrás del pantalón su móvil, dibujó algo en la pantalla y empezó a pulsar en ella, no sabía muy bien que hacía pero creo que estaba mandándole un mensaje a alguien. Al segundo ella me miró y me sonrió.

Tu: E-es para mi padre, tengo que avisarle de que ya he pedido el taxi y que voy para el aeropuerto.
Ali: Oh... vale, vale.

Bajé la mirada e inconscientemente fruncí el ceño sin saber que aún ____ me estaba mirando.

Tu: ¿Qué te pasa? - Se volvió a meter el móvil en el pantalón.
Ali: ¿Qué? - Me cogió desprevenida -. ah, no, nada.
Tu: Ali, nadie pone esa casa por nada, anda dímelo - Se acercó a mi.
Ali: ¿Niall... Niall lo sabe? - ___ se quedó inmóvil en el sitio.

Ella se tomó un tiempo en reaccionar, no sabía que pasaba por la mente de aquella chica asustada.

Tu: Ayer por la noche le llamé... se lo iba a decir, te lo juro - Inspiró y suspiró lentamente - Le colgué antes de que pudiera hacerle más daño.
Ali: ¿Daño? No, no, no para nada ____, debes decírselo - Me acerqué a ella y le cogí de la mano - Todo va a salir bien - Le abracé a sabiendas de que mis palabras no le calmarían.

Oímos el claxon del taxi que esperaba en la puerta, nos dirigimos hacia ella y cogimos las maletas para meterlas en el taxi mientras que el conductor salió para ayudarnos. La miré por unos momentos, parecía tranquila pero sé que por dentro era un mar de nervios.

Ali: ¿Vas a llamar a Niall?

Me dedicó una sonrisa reconfortante y me dio un beso de despedida en la mejilla.

Tu: Te echaré tanto de menos Ali, llámame todos los días.
Ali: No más que yo a ti, amiga, por favor, ten mucho cuidado - No quería llorar.
Tu: Lo tendré, tenlo tu también, adiós.

Odiaba las despedidas tanto como yo.
Nos abrazamos y la dejé montándose en el taxi. No paré de decirle adiós con la mano hasta que la perdí de vista dejando una soledad notable a mi alrededor. Entré en casa y cerré la puerta con cuidado, volví a la cocina para terminar de beberme mi tila que se había enfriado. Cogí el baso y lo metí en el microondas, me apoyé en encimera mirando la amplia cocina cuando de repente mis ojos se posaron en mi móvil «No lo hagas, ella se enfadará, pero...» pensé.

[Narras tú]
Llegaste al aeropuerto con media hora de adelanto. Decidiste sentarte en unos asientos que había delante de la puerta de embarque. Sacaste tu móvil y le mandaste un WhatsApp a tú padre.

| TU |
- Ya estoy en el aeropuerto. 6:45
-  faltan como unos 25 minutos para que salga el avión :) 6:46
| Papá |
- Vale cielo, si tienes algún problema llámame. 6:49

De repente el móvil te sonó, supusiste que era tu padre para hablar contigo de algo, así que ni si quera miraste el número.

- ¿Diga?

Al otro lado de la línea nadie contestaba.

- ¿Hola? - Preguntaste de nuevo.
- No vuelvas a hacerme lo de esta noche - Su voz ronca resonó.

Un calambre familiar te recorrió desde el pecho hasta la cabellera.

- Niall... - Susurraste.
- No he podido dormir pensando en ti, estaba tan preocupado.

Tu corazón se aceleró tanto al oír su voz.

- Me acaba de llamar Ali, me lo ha contado todo.
- ¿Qué? - Te alteraste - ¿Por qué ha hecho eso? Será imbécil.
- ____, no lo es.
- No la defiendas.

Niall no habló.

- Lo siento Niall.
- No pasa nada.
- ¿Estás enfadado?

Él suspiró.

- Enfadado no es la palabra, molesto, más bien. ¿Por qué me tenía que enterar por otra persona de todo esto? Se supone que no hay secretos entre nosotros.
- Lo siento... tan solo no quería preocuparte.
- ¿Cuando vas a entender que te amo por encima de cualquier cosa? Que tus problemas son mis problemas, que tus miedos son mis miedos, que tu eres mía y que yo soy tuyo. Estamos juntos en esto.
- Te necesito Nialler - Empezaste a llorar.
- No llores, no quiero que llores, pronto volverás a verme, te lo prometo.

Respiraste hondo.

- Te necesito Niall, cerca de mi, ahora.
- Pronto cielo.

Viste en las pantallas que tu vuelo salía dentro de diez minutos y ya tenías que ir entrando en el avión.

- Me tengo que ir - Susurraste.
- Esta bien, adiós ____ .
- Te amo.
- Sabes que yo siempre te amaré más.

Colgaste, te secaste las lágrimas y entraste al avión.

[Narra Niall]
Bloqueé el móvil y lo guardé dentro de mi maleta, de lejos vi a los de seguridad que me acompañaban a la puerta de salida, había chicas gritando mi nombre, yo apenas me paraba a saludarlas, tan solo pensaba en ella, en lo que le temblaba la voz cuando me dijo que me amaba. Estaba mal por ella, necesitaba tenerla entre mis brazos de nuevo.

X: Niall, debemos ir por la otra puerta, aquí hay demasiada gente.
Niall: Vale, ¿por ahí la veré también?
X: Si, iremos dentro del aeropuerto, la podrás ver mejor.

Le miré en señal de aprobación y nos dirigimos hacia dentro.

[Narras tú]
Al fin estabas de vuelta en tu país.
Viste tu maleta pasar por las cintas y corriendo la cogiste, pero al pesar tanto trastabillaste y casi te caes, casi, menos mal que alguien te sujetó por detrás.

Tu: Oh, perdón, que torpe soy - Te quitaste los pelos de la cara mientras que te levantaste con ayuda.

Notaste como la persona que te ayudaba a levantarte te sujetaba con fuerza por la cintura. Veías como la gente de tu alrededor te miraba con cara de asombro, te incomodaste un poco y te diste la vuelta para verle la cara, al hacerlo tus piernas casi te dejaron de responder, tu boca se secó al completo mientras que agarrabas con fuerza los antebrazos de la persona que te sujetaba.

Tu: Niall...


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martes, 2 de julio de 2013

Hear Me - Capítulo 25

[Narra Niall]

''Hola mamá soy Niall... eh, solo llamaba para saber como estabais, llámame cuando escuches este mensaje por favor... te echo de menos, adiós''.

Tiré el iPhone encima de la cama, me levanté y fui a mirar a través del gran ventanal de la habitación de mi hotel. Se ve todo Manhattan desde donde estoy, piezas minúsculas corren a gran velocidad por las avenidas, apenas puedo apreciar a las personas desde mi ventana, sin duda, con estas vistas te sientes enorme. Empieza a caer una suave lluvia del cielo plagado por nubes oscuras, las gotas chocan contra el cristal, me nublan la vista y de la nada se me viene a la mente aquel día en que la hice mía. Cerré los ojos e inspiré profundamente recordando cada caricia que le di, su piel blanca y lisa junto a la mía, sus carnosos labios llenándome de besos, el placer que sentimos al hacer el amor. Suspiré y me di la vuelta para evadirme de aquellos pensamientos, cogí el móvil, salí de mi habitación y me dirigí hacia la habitación de Harry.

Harry: ¿Si? - Oí su voz por detrás de la puerta.
Niall: Tío, soy yo.

Al segundo me abrió la puerta y me dejó pasar. Vi que no estaba solo, Liam estaba con él.

Liam: Hey - me sonrió - que pronto has llegado.
Niall: Me aburría solo - Dije mientras saludaba a Harry con un abrazo.
Harry: ¿Y los demás? - Se tiró en su cama y encendió el móvil.
Niall: Ni idea tío.
Harry: Pues como no vengan ya nos vamos sin ellos.

Fui al minibar y saqué unas cervezas para los chicos y para mi.

Niall: Toma y relajate - le di la cerveza.
Harry: Gracias tío, por cierto, ¿que tal te va?
Niall: ¿Qué?
Harry: Ya sabes... - Movió la cerveza y le dio un trago.
Liam: No vales para hablar de eso Harry. - Se rió.
Harry: Lo sé - Se rió.

Oímos como alguien llamaba a la puerta pero nadie se levantaba a abrir, nos mirábamos entre nosotros para que alguien fuera.

Niall: Ah, no, es tú habitación. - Señale a Harry.

Harry a regañadientes se levantó a abrir.

Harry: ¡Zaaaaaayn! - Dijo levantando las manos y tirando un poco de cerveza al suelo.
Zayn: ¡Tío, tío, que me la tiras encima! - Se reía.

Louis llegó en ese mismo momento.

Louis: ¿Por qué huele tanto a cerveza? - hizo un mohín con la cara.
Harry: ¡Looooouis! - Volvió a levantar los brazos y a derramar la cerveza.
Louis: ¿Ya está borracho? - Dijo sonriente al entrar a la habitación.

Harry cerró la puerta y se fue a cambiar de camiseta ya que la tenía llena de cerveza. Al rato salió del cuarto de baño y nos llamó para que saliéramos. Los cinco nos dirigimos al aparcamiento trasero donde nos esperaban los coches.

Liam: ¿A dónde vamos?
Niall: No sé, pero sacarme de aquí. - Entré en el coche el primero.
Zayn: Yo no conozco ningún sitio de por aquí cerca para salir.

Liam entró en en coche.

Liam: Listo, he hablado con el chofer, el nos llevará.

Todos se montaron el el coche para dirigirnos hacia aquel lugar del cual ninguno habíamos oído hablar. En el coche había bebidas, música alta y casi que ya notábamos el efecto del alcohol, o por lo menos yo. Cuando aparcamos y salimos del coche nos encontramos a tres guardaespaldas justo enfrente del coche.

G.E: Chicos, no os mováis de aquí ¿Entendido?

Nos miramos entre nosotros algo confusos.

Harry: ¿Qué pasa? - Preguntó al chofer.
C: Tienen que ir a inspeccionar la zona.
Louis: ¿Para qué?
C: ¿Y me lo preguntáis a mi? ¿No es evidente?

Louis miró hacia la cola de la puerta, había un montón de paparazzis intentando sacar una exclusiva de nosotros. Los guardaespaldas vinieron y rápidamente nos llevaron hacia dentro de la discoteca.
Las luces de neón eran cegadoras, mis ojos tardaron un buen rato en acostumbrarse a ellas, la música hacía vibrar el suelo y las paredes, la gente no paraba de bailar, muchas chicas se nos acercaban y hablaban con nosotros, pero yo no podía pensar en otro chica que no fuera ella.

Niall: Chicos, ahora vengo, voy a por una copa.
Zayn: Te acompaño - Se levantó.

Zayn y yo nos nos dirigimos hacia la barra donde enseguida nos atendieron, yo me pedí un Alexander que llevaba Gin, crema de cacao, crema de leche y nuez moscada, mientras que Zayn se pidió un Vodka Martini, ni siquiera sabía lo que llevaba aun que me pareció algo amargo a primera vista.

Zayn: Eh Niall ¿Qué te pasa?
Niall: ¿Eh? ¿Qué? - dije volviendo en mi.
Zayn: ¿Quieres un Margarita o algo? Ya que lo miras tanto.
Niall: No, me he quedado embobado.
Zayn: ¿En qué pensabas? - Le dio un sorbo a su bebida.
Niall: En ella - Sonreí con angustia.
Zayn: ¿Que pasa? ¿Estáis mal o algo?
Niall: Que va, tan solo que... bueno, le... echo de menos.

Zayn me miró extrañado, luego le dio otro sorbo a su copa y se levantó.

Zayn: A veces hay que cometer locuras cuando uno está enamorado ¿Sabes?
Niall: ¿Qué?
Zayn: ¿Ves a todas esas tías? - Me pasó una mano por el hombro y señalo a la pista de baile - Pues todas esas tías pueden ser tuyas con solo chasquear dos dedos.
Niall: Pero yo no quiero hacer eso.
Zayn: Incomprendido de la vida, esa es la locura, cualquier tío iría a la pista y se pondría a bailar con todas esas tías, un hombre como tú no haría eso. La locura de un hombre enamorado.
Niall: Que inspirador Zayn - Le sonreí.
Zayn: Bendito seas alcohol - Levantó la copa y brindamos.


[Narras tú]

Ali se apoyaba en el quicio de la puerta de tu habitación, miraba muy atenta como doblabas la ropa y la metías en la maleta.

Ali: Tranquilizate _____, desde aquí puedo ver como te tiembla el pulso.
Tu: No es nada, tranquila, solo son nervios, ya se me pasarán.

Ella entró en tu cuarto, se sentó en tu cama y puso sus manos encima de las tuyas haciendo que pararan de doblar ropa.

Ali: Tan solo es una semana, no es un mes - Sonrió.
Tu: Si, una semana en mi país y después otra en el hospital - Te  deshiciste de sus manos y fuiste a coger más ropa de tu armario.
Ali: ¿Me vas a echar de menos?

En ese momento te paraste y suspiraste muy hondo.

Tu: Mucho - Te giraste y le sonreíste con cierta amargura en tus ojos.
Ali: Todo va a salir bien.
Tu: ¿Y si no sale?
Ali: Saldrá bien, lo sé.
Tu: Ojalá fuera la mitad de segura que tú.

Ali se levantó corriendo a darte un abrazo, te hacía sentir tan bien el calor de un abrazo después de estar tan tensa.
Viste el reloj, eran las dos de la mañana, ese pequeño nudo en tu estómago no te dejaba dormir ya que al día siguiente tendrías que coger un avión hacia tu país. Dabas vueltas por tu cama, te morías de calor y a la vez tenías frío, te levantabas para beber agua, te volvías a acostar... pero nada, no podías tranquilizarte. «Joder Niall, como me gustaría tenerte aquí, diciéndome que todo va a salir bien...» pensabas. Esa era una de las principales razones por la cual no conciliabas bien el sueño, Niall no sabía nada de tu operación. Sin pensar cogiste el teléfono y llamaste a Niall.

- ¿Diga? - Su voz ronca por dormir te dio tranquilidad nada más escucharla.
- Niall... por favor, dime que todo va a salir bien - Todo tu ser estaba sumido en una amargura.
- ¿Qué te pasa? ¿Estás bien? - Dijo muy alterado y nervioso -. Mi vida, ¿_____? ¿Qué pasa?
- Niall, esta puede ser la última vez que pueda oír tu voz más o menos bien.
- ¿¡Qué!? Por Dios ____ dime donde estás ¿¡Qué te pasa!? - Su tono se volvió aun más alterado.



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