Sentías los rizos de Harry echados hacia atrás, apoyabas tu
cara en su espalda, cada vez tu sonrisa era más y más grande, te encantaba
estar abrazándole durante tanto tiempo. No sabias hacia donde se dirigía Harry,
pero tampoco te importaba, mientras que estuvieras con él te sentías segura.
Harry paro la moto delante de una casa se bajo y te ayudo a bajar.
Tu: ¿Qué hacemos aquí?
Harry: En una casa de los chicos y mía.
Tu: Guay. Pero… ¿Por qué estamos aquí?
Harry: Sh… entra y lo veras.
Harry te cogió cariñosamente de la mano y fuisteis a dentro
de la casa, cuando entraste lo primero que viste fue el gran salón que tenia,
con unas ventanas a lo lejos que daban a la entrada de un bosque.
Tu: Es muy bonita. –Dijiste entusiasmada.
Harry: Y a demás tiene piscina.
Tu: ¿Enserio? Que guay, enséñamela.
Harry: Es esa, mira.- Dijo mientras caminabais cogidos de la
mano.
Os pusisteis al borde de la piscina, Harry te puso las manos
en la cintura y empezó a besarte. No os estabais dando cuenta, pero cada vez
estabais más cerca de la piscina, hasta que sin quererlo Harry dio un paso en
falso y os caísteis en ella.
Tu: ¡AAAAW! ¡QUE FRIA!- Dijiste mientras corrías a las
escaleras.
Antes de subir a la escalera miraste a Harry que estaba
detrás de ti, te miraba con esa cara insinuante.
Te acercaste a el y te subiste a él cruzando tus pies alrededor
de su cintura y tus manos alrededor de su cuello.
Harry: Tu no eras tan lanzada ¿Qué le ha pasado señorita?
Tu: Pues- le besaste.- Tú eres lo que me ha pasado.
Te dio un beso en los labios y te sumergió, todavía os
estabais dando besos debajo del agua, hasta que salisteis para respirar.
Tu: ¿Nos salimos?
Harry: Si, hace frio.
Corristeis a dentro y Harry te dio una toalla, el se quito
la camisa toda empapada y se relio una toalla por debajo del abdomen.
Tu: Harry, ¿Puedes venir?
Harry: Claro cielo ¿Qué pasa?- Dijo acercándose a ti.
Tu: Ven, siéntate conmigo.
Harry: Oh, quieres mimos.
Tu: Sep.
Harry se sentó a tu lado en la cama, os tumbasteis y os
quedasteis abrazados. Pasaron las horas y te desvelaste, Harry todavía seguía
durmiendo y como tú no tenias ganas pensaste en irte a ver la tele, pero cuando
te querías ir Harry te cogió por detrás y te echo a la cama.
Harry: Que mala, me querías dejar solo.
Tu: ¿Por qué? ¿Te da miedo la oscuridad?- Dijiste con tono interesante.
Harry: Uf... mucho.
Te quedaste a su lado, los dos tumbados juntos, pero después
te sentaste encima del y bajaste cabeza para darle un beso en sus labios. Harry
se incorporo y te beso en el hombro bajándote la tiranta del sujetador, fue
dándote besos desde el hombro hasta el cuello, eso te puso los pelos de punta.
Harry: ¿Voy muy deprisa? A lo mejor quieres to…- Le besaste
antes de que terminara esa frase.
Tu: Sh..
Le agarraste la cara con una mano para besarle mientras que
el te desabrochaba el sujetador.
Tu: Harry…
Harry: ¿Qué pasa?
Tu: Antes de nada… una cosa.
Harry: ¿Qué?
Tu: Soy… es que yo soy… buf, dios *Que vergüenza*
Harry: ¿Virgen?
Tu: ¡Tanto se nota!?
Harry: Para nada, pero si quieres lo dejamos, no quiero que
te sientas presionada.
Tu: No me siento presionada.
Solo que no se, quizás después…
Harry: ¿Qué?
Miraste a Harry y bajaste tu mirada, el te noto algo
insegura, a si que antes de que te pusieras triste el te abrazo.
Harry: No quiero que estés mal.
Tu: ¿A tu lado? Nunca.
Harry empezó a besarte, tú te dejabas llevar. Te tumbo en la
cama y te beso suavemente en los labios.
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